CICLISMO / VUELTA A ESPAÑA
Movistar, puntos salvadores y un nuevo patrocinador
final de la vuelta
El equipo telefónico casi evita el descenso con los puntos de Enric Mas y amplía presupuesto
Clasificaciones de la Vuelta a España
La tensión por los puntos ha resultado de tal calibre en el Movistar que incluso el vencedor de la Vuelta a España, Remco Evenepoel, jugaba con el estrés de los telefónicos para administrar las estrategias en carrera. «Ellos tienen el problema de los puntos y se tenían que pensar mucho si jugar a todo o nada porque podían perder la base de puntos de Enric Mas». Con la suma que realiza el mallorquín al ser segundo de la Vuelta (680) y el acumulado por el grupo durante estas tres semanas (pueden alcanzar 1.260 puntos), el Movistar estaría prácticamente salvado del descenso.
El horizonte de un descalabro y pérdida de categoría era un drama en el Movistar, un equipo concebido por Telefónica, una de las principales empresas del país que aporta 17 millones anuales. La liga Pro Team (así se denomina la segunda división) implica serias complicaciones para ser invitado al Tour o al Giro, que suelen apostar por equipos de su país, como la Vuelta lo hace por los españoles. También genera riesgo de exclusión en las principales clásicas y carreras elite del calendario.
El hecho de concursar en el Pro Team también se traduce en menos ingresos por una menor visibilidad publicitaria y repercusión mediática, lo cual equivale a una pérdida de atractivo para los mejores corredores y también una rebaja en el caché para los patrocinadores.
Durante la Vuelta, el Movistar recibió buenas noticias procedentes de Inglaterra, donde el madrileño Gonzalo Serrano consiguió 200 puntos al adjudicarse el Tour de Gran Bretaña, que se suspendió en la cuarta etapa por el fallecimiento de la Reina Isabel II. Con ese bagaje, Serrano ingresó entre los diez ciclistas del Movistar con más puntos. En el baremo UCI solo se contabiliza a los diez mejores ciclistas de cada formación.
Este revuelo de los rankings condiciona sobremanera el comportamiento deportivo del equipo. Ningún ciclista del Movistar acudirá al Mundial de Australia, ya que consideran sus directores que la probabilidad de sumar puntos es escasa (Valverde sí quería ir) y además se podría dar la circunstancia de un ciclista del Movistar trabajando para corredores de escuadras rivales, al disputarse el campeonato del mundo por selecciones nacionales.
En este trasiego, Eusebio Unzué ha trabajado para sumar un segundo patrocinador a su proyecto. Un sponsor que aportará más financiación al equipo, que ahora se mueve en la zona media y baja del pelotón internacional, muy alejado de los presupuestos de Ineos (45 millones), UAE (35) o Jumbo (32), que gracias a esa financiación consiguen a los mejores ciclistas.
Actualmente Movistar entrega el dinero a la empresa de Unzué (Abarca Sports) y éste lo distribuye en salarios, concentraciones, viajes y demás. Con un nuevo patrocinador, confía Unzué en apuntalar la plantilla con cuatro o cinco fichajes de ciclistas, aunque no de primer nivel. En el escalafón de líderes solo estaba libre Richard Carapaz y el ecuatoriano firmó por el Education First para las próximas temporadas.
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