Rafael Rojas, hermano mayor de Consolación: «Todos los utreranos estamos montados en el barquito de la Virgen»

La Virgen de Consolación cuenta con una historia apasionante, que comenzó a inicios del siglo XV y que incluso concentró una importante romería a la que acudían devotos de toda la comarca. Una romería que se suspendió en el tramo final del siglo XVIII, por el rey Carlos III, a causa de los tremendos desórdenes que se producían.

Rafael Rojas es el actual hermano mayor de la hermandad de la Virgen de Consolación de Utrera, una persona que está viviendo de una manera muy especial la preparación de la que va a ser una jornada única.

―¿Cómo recibió la hermandad de Consolación la noticia de la invitación a participar en la procesión?

Recuerdo perfectamente ese día, cuando nos llamaron desde el Arzobispado para hablar con urgencia con nosotros. Me acerqué al Palacio Arzobispal y me dieron la noticia de que nos invitaban a participar en la procesión. Una noticia que recibimos al mismo tiempo con mucha alegría e ilusión, porque es algo histórico que se va a vivir, ya que la Virgen de Consolación no ha salido nunca de Utrera.

―¿Cómo se vive en Utrera la piedad popular y la devoción a la Virgen de Consolación?

Hay muchísimas personas tanto de Utrera como de los pueblos de los alrededores que le tienen una fe enorme a la Virgen de Consolación. Las épocas en las que más se materializa esta devoción es en el triduo que se realiza en torno al 1 de mayo, el aniversario de la coronación y, por supuesto, el 8 de septiembre, su festividad. Fechas en las que se llenan las calles de peregrinos que vienen de muchos lugares distintos y que vienen a Utrera con una devoción enorme. La Virgen de Consolación es el corazón de Utrera.

―¿Qué es lo que diferencia a la Virgen de Consolación del resto de devociones de la provincia?

En los últimos años, la Virgen ha salido el 1 de mayo en conmemoración de su coronación canónica, que tuvo lugar en 1964, pero el día 8 de septiembre espera en su santuario a que todos sus hijos vengan. Por eso, ahora tenemos por delante un momento muy importante en Sevilla en el que podremos disfrutar con Ella en las calles.

―¿Cómo cree que va a responder el pueblo de Utrera el 8 de diciembre?

Estoy convencido de que va a responder bastante bien; de hecho, ya está respondiendo en todos los actos que se organizan. Espero y animo a todos los devotos y a todo el pueblo de Utrera a que la acompañen en Sevilla.

―¿Cómo calificaría lo que supone que Consolación procesione en Sevilla?

Es un momento histórico total. Para ello hay que conocer la historia de la Virgen de Consolación, que hasta el siglo XVIII concentró una importante romería, que se cortó de manera abrupta. Desde aquel momento dejó de salir el 8 de septiembre, recuperándose esa salida el 1 de mayo en 1965, como aniversario de su coronación. Gracias a la procesión del 8 de diciembre en Sevilla, Utrera va a estar marcada en el mapa a nivel internacional.

―¿Cuáles van a ser los detalles que van a marcar la procesión de la Virgen de Consolación en Sevilla?

Habitualmente, cada 1 de mayo, la Virgen ha procesionado con el paso que se hizo después de la coronación, y en Sevilla lo va a hacer con el paso que salió del taller de Fernando Marmolejo, que se hizo para la coronación, que se ha restaurado para la ocasión. Por supuesto que también contará con el famoso barquito que identifica a la Virgen, en el que estamos montados todos los utreranos y los devotos.

―¿Por qué se ha elegido la iglesia de los Terceros de Sevilla como punto final de la procesión de la Virgen de Consolación?

Este aspecto ha sido una decisión tomada por la organización de la procesión de clausura. Entiendo que se ha tomado esta decisión por ser una hermandad en la que también es importante el nombre de la Virgen de Consolación. La acogida de la hermandad y de los vecinos de esta zona de Sevilla está siendo magnífica.

―¿Qué ambiente se está viviendo en la hermandad en estas fechas?

Un ambiente muy bonito, aunque de mucho trabajo, porque hay veces que incluso estamos desbordados. En cualquier caso estamos muy contentos porque todo el mundo se está volcando, cada uno de los miembros de la junta está trabajando en diferentes aspectos, con además una importante agenda de actos previos a la procesión del día 8 en la que destacan un encuentro con las hermandades que venían a peregrinar a Utrera, un concierto titulado 'Cantes y Plegarias a la Virgen de Consolación de Utrera', así como una interesante mesa redonda que va a estar moderada por Alberto García Reyes, director de ABC de Sevilla.

―¿Cuál cree que será el momento más especial del recorrido de la Virgen de Consolación el día 8 en Sevilla?

La hermandad tiene unos lazos muy especiales con las Hermanas de la Cruz, ya que son camareras de honor, por lo que cuando el cortejo llegue al entorno del convento en Sevilla, creo que se va a vivir un instante muy especial, en el que van a estar las Hermanas de la Cruz esperándonos.

―¿Cómo volverá la Virgen de Consolación el día 9 al santuario?

El día 9, la Virgen de Consolación saldrá de los Terceros en un traslado privado prácticamente a mediodía. Llegará a la capilla de la Virgen de Fátima, en la avenida de Las Veredillas y, a partir de ahí, a primera hora de la tarde, comenzará su recorrido de regreso al santuario de Consolación, para que el pueblo de Utrera pueda acompañarla. Iremos por el camino más corto que se pueda trazar, pero queremos que todo el pueblo de Utrera sea el que acompañe a la patrona.

―¿Cómo vive Utrera la piedad y la religiosidad popular?

En Utrera, como ocurre en toda Andalucía y en Sevilla, somos muy marianos. Cualquier devoción mariana que salga a la calle concentra una importante cantidad de público, somos marianos por excelencia. Nunca se ve solo el santuario de Consolación, vengas a la hora que vengas, siempre hay alguien rezándole a la Virgen.