El alarmante declive de Lewandowski

Con 12 jornadas de Liga y cuatro de la fase de grupos de la Champions League, el polaco sumaba 18 tantos, 13 de ellos en la competición doméstica en la temporada 2022-23. Este año solo ha marcado seis goles, un tercio, cinco de ellos en Liga, aunque hay que recordar que se ha perdido tres partidos completos después de lesionarse en Oporto, donde solo jugó media hora. Lewandowski reapareció ante el Madrid, coincidiendo con el inicio de esta crisis de juego y resultados que atraviesa el Barça.

El apagón del delantero se produce tras el Mundial de Qatar. Antes del torneo internacional había marcado 18 goles en 19 partidos y el barcelonismo se frotaba las manos. De hecho, el equipo azulgrana adolecía de cierta dependencia del futbolista polaco que decidía la mayoría de partidos. Tras su regreso de Qatar sumó 21 goles en 39 encuentros. Este martes, al igual que la semana pasada durante el clásico o el sábado en Anoeta, Lewandowski saltó al terreno de juego pensando que era el momento ideal para reencontrarse con el gol. Hamburgo es una plaza que se le daba bien de su etapa en la Bundesliga con el Borussia y el Bayern. Pero volvió a dejar dudas, fue sustituido y presenta un dato preocupante: ya encadena seis partidos sin marcar con el Barça entre todas las competiciones, su peor racha goleadora desde una de diez encuentros con el Borussia Dortmund entre diciembre de 2010 y febrero de 2011, en los inicios de su carrera.

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A principios de temporada también fue cuestionado pero un gol suyo sirvió para culminar una remontada y conseguir los tres puntos en Villarreal (3-4), al igual que en Pamplona (1-2). Tras el parón de selecciones encadenó tres partidos marcando (Betis, Amberes y Celta). Especial actuación fue la última, anotando dos goles en cuatro minutos para empatar los dos tantos iniciales de los gallegos. Ese partido se ganó con un gol sobre la bocina de Cancelo. Desde entonces, un lejano 23 de septiembre, su casillero permanece en blanco.

Lewandowski estuvo desaparecido este martes. Más allá de los goles, los números lo certifican: solo intervino 29 veces, el que menos del equipo, y su acierto de pase solo fue del 66,7 por ciento. Al final del primer tiempo no había disparado ni una sola vez a puerta y solo había completado cuatro pases.

Esta desconexión del polaco preocupa en el club catalán, que le fichó para ser el jugador referencia en ataque, como demostró el año pasado convirtiéndose en el máximo goleador de LaLiga. No hay que olvidar la apuesta que hizo Laporta, que pagó 45 millones de euros más otros 5 en variables por un futbolista que ese verano cumplía 34 años. El presidente culé le firmó por cuatro años para poder amortizar contablemente el fichaje. No obstante, ello también supone una fuerte carga salarial, ya que su contrato es ascendente, comenzaba en 20 millones de euros brutos y suponía un total de unos 100 millones en esos cuatro años.