Gutiérrez-Rubí, el gurú español de los líderes iberoamericanos

La noticia se ha conocido semanas después de que Gustavo Petro se convirtiera –en su tercer intento– en el primer mandatario de izquierdas en Colombia. Detrás de esta victoria estaría el estratega español, quién se ha erigido en los últimos años en el gran gurú de buena parte de los líderes de América Latina. Región en la que ha invertido sus conocimientos en las últimas tres décadas.

Después de comenzar su trayectoria como diseñador gráfico en agencias de marketing, Gutiérrez-Rubí se centró en la comunicación pública a través de la empresa Ideograma, fundada en 1986, con la que ha desarrollado su labor en una decena de países de Iberoamérica, incluido España, en tareas como la comunicación estratégica e institucional y así como en campañas electorales.

Durante las últimas décadas, Gutiérrez-Rubí ha sido testigo de la brecha de confianza que se ha abierto entre la ciudadanía y los políticos, en gran medida debido al discurso de estos, negativo y polarizador. También del papel que las nuevas tecnologías podían jugar a la hora de conectar con esa ciudadanía.

Consciente de la necesidad de revertir el tono de los mensajes, ha huido de la beligerancia y buscando provocar la ilusión en los electores con una comunicación más moderada, constructiva, creativa y empática. Así, en Colombia es conocido como el asesor que bajó a Petro de la tarima y lo puso a jugar al fútbol, a dos semanas de la segunda vuelta de las presidenciales; en el caso de la expresidenta Cristina Fernádez de Kirchner, intentó que esta rebajara el tono y se mostrara más amigable y menos combativa, incluso suavizando su forma de vestir; mientras que con Alberto Fernández, procuró que el líder izquierdista escuchara a los ciudadanos y que fuera más positivo.

Si bien muchos le muestran como asesor de la progresía iberoamericana, lo cierto es que Gutiérrez-Rubí ha colaborado también con políticos conservadores a ambos lados del Atlántico. Después de asesorar a Alfredo Rubalcaba, cuando este era líder del PSOE, brindó sus conocimientos a Juan Manuel Moreno Bonilla, que se convirtió en el primer presidente del PP en Andalucía; y el Gobierno de Piñera, en Chile, también le pidió consejo para rebajar la tensión durante las protestas sociales de 2019.

Ahora, parece que será Sheinbaum quien pueda aprender de las artes de este asesor, que defiende la capacidad de las mujeres para hacer política de una forma diferente. «La política secuestrada y monopolizada por un exceso de testosterona no puede responder ya a las nuevas demandas sociales de la nueva política que nuestra democracia necesita», escribió en 2016 en uno de los medios en los que colabora Gutiérrez-Rubí, autor también de una veintena de libros. Una declaración de intenciones y todo un reto en un país como México.