'Slow living' o cómo conseguir un descanso profundo este otoño

Acabamos de dar la bienvenida al otoño y, por una vez, parece otoño. No es que el suelo esté lleno de hojas de los árboles y hayamos sacado las prendas más otoñales que tenemos en el armario, pero sí han llegado las temperaturas bajas y los días son más cortos. Esta temporada, que suele ir de la mano de la vuelta al trabajo, el colegio y las actividades diarias, puede sentirse como un reto y llegar a ser abrumadora para muchas personas. El descanso, sin ir más lejos, es uno de los mayores damnificados cuando llega esta estación.

El regreso a la rutina suele ser sinónimo de estrés, madrugones y falta de tiempo para el autocuidado, pero un descanso consciente es una herramienta poderosa para no solo recargar energías, sino también para mejorar nuestra salud mental y afrontar el día a día con mayor equilibrio.

El otoño, con su ritmo más pausado, puede ser la mejor estación para integrar el descanso en tu rutina diaria, evitando relegarlo solo a las vacaciones. Beatriz Gil Bóveda, psicóloga especialista en autoestima, liderazgo e inteligencia emocional y fundadora y CEO de Psique Cambio indica que el momento ideal para restaurar cuerpo y mente es el otoño porque «nos invita a reflexionar y pausar».

«Así como la naturaleza se prepara para el invierno, nuestro cuerpo y mente necesitan detenerse y recuperarse tras el bullicio del verano. Incorporar el descanso en esta época es crucial para evitar el agotamiento físico y mental, especialmente cuando volvemos a la vorágine de las responsabilidades diarias», indica.

Diversos estudios han demostrado que un descanso adecuado mejora la concentración, potencia la creatividad y fortalece el sistema inmunológico. Este último punto es especialmente importante en otoño, cuando los resfriados y otras enfermedades respiratorias son más comunes. Además, descansar bien nos permite gestionar mejor nuestras emociones, reducir la ansiedad y mantener una mente más clara para tomar decisiones.

Con el estilo de vida moderno, a menudo caemos en la trampa de pensar que descansar es «perder el tiempo». Nada más lejos de la realidad: el descanso es una inversión en nuestra salud a largo plazo. A continuación, Beatriz Gil Bóveda comparte cinco estrategias prácticas para disfrutar de un descanso reparador y hacer frente a las responsabilidades otoñales sin agotarte.

1. Encuentra un equilibrio saludable entre trabajo y descanso. El regreso a la rutina puede ser abrumador si no encontramos un equilibrio entre nuestras responsabilidades laborales y el descanso. Tal como dice Beatriz Gil Bóveda, «marcar límites claros es esencial, sobre todo si trabajas desde casa o tienes horarios flexibles», por lo que respetar tu tiempo libre y evitar que el trabajo invada tus momentos de descanso es clave para mantener la energía.

«Aprovecha las tardes de otoño, con su atmósfera más tranquila, para desconectar de las pantallas y realizar actividades relajantes. Lee un libro, escucha música suave o da un paseo por un parque cercano. Estas pequeñas acciones pueden marcar una gran diferencia en tu bienestar», recomienda.

2. Ajusta tu día a las horas de luz. El otoño trae consigo menos horas de luz solar, lo que puede afectar nuestro estado de ánimo y energía. Para contrarrestarlo, es importante aprovechar al máximo la luz natural disponible. Exponerte al sol por la mañana no solo mejorará tu ánimo, sino que también ayudará a regular tus ritmos circadianos, lo que resulta en un sueño más reparador por la noche.

Adapta tu rutina de tarde a la disminución de luz natural. «Crear un ambiente acogedor en casa, con luces cálidas y suaves, te ayudará a relajarte y a preparar tu cuerpo para el descanso», señala la psicóloga.

3. Introduce micropausas a lo largo del día. Beatriz Gil Bóveda insta a que no esperes a que llegue la noche para descansar: «Incluir micropausas durante tu jornada es una excelente forma de mejorar la productividad y evitar el agotamiento». En este sentido, cada hora tómate unos minutos para estirarte, caminar o respirar profundamente. Estos pequeños descansos ayudarán a que tu mente se refresque, manteniéndote con energía constante durante el día.

4. Prioriza el sueño y crea un ambiente relajante. El sueño es uno de los pilares fundamentales para una buena salud. El otoño es la época perfecta para establecer una rutina de sueño constante, acostándote y levantándote a la misma hora cada día. Asegúrate de que tu dormitorio esté diseñado para favorecer el descanso: un ambiente oscuro, fresco y libre de ruidos es esencial para disfrutar de un sueño profundo.

Además, reduce la exposición a dispositivos electrónicos antes de dormir. La luz azul que emiten las pantallas puede interferir en la producción de melatonina, la hormona que regula el sueño. Desconectar de la tecnología al menos una hora antes de dormir favorecerá una mejor calidad de sueño.

Por otro lado, si te cuesta conciliar el sueño es aconsejable tomar suplementación de melatonina. En este sentido, Domma y Jelly Pills son opciones que cuidan de ti y de tu descanso, asegurándose que este sea profundo y reparador.

5. Practica actividades de relajación consciente. El otoño es el momento ideal para reconectar contigo mismo mediante actividades de relajación consciente. Prácticas como el yoga, la meditación o simplemente la respiración profunda son excelentes herramientas para reducir el estrés acumulado y restaurar tu energía mental y física. Dedica unos minutos al día a estas actividades para calmar tu mente y cuerpo.

En nuestra sociedad, muchas veces estamos atrapados en la carrera de hacer más en menos tiempo, lo que puede llevarnos a un estado de agotamiento. El concepto de slow living o «vida lenta» es una alternativa consciente para disfrutar de cada momento. El otoño, con su ritmo más pausado, es la estación perfecta para implementar este estilo de vida.

- Desconecta de la tecnología. Uno de los mayores enemigos del descanso es el uso excesivo de la tecnología. Establece momentos durante el día para desconectarte por completo de las pantallas. Apagar el teléfono, la tablet y otros dispositivos al menos una hora antes de dormir reducirá la sobreestimulación mental y mejorará la calidad del sueño.

El otoño es una excelente oportunidad para incorporar rituales de autocuidado en tu día a día. Prepara una infusión caliente, date un baño relajante o practica ejercicios de respiración profunda antes de dormir. Estos pequeños rituales pueden tener un gran impacto en ti.

- Prepara tu entorno para un descanso reparador. El ambiente donde descansas influye directamente en la calidad de tu sueño. Aprovecha la llegada del otoño para ajustar la decoración de tu hogar, creando un espacio acogedor y propicio para la relajación. En este sentido, también los colores que vestimos influyen en el 'slow living'. Los tonos tierra y cálidos invitan a introducirnos en el otoño.

• Colores cálidos y suaves: «Incorpora tonos naturales como marrones, ocres y naranjas que promuevan la calma y el confort visual», aconseja Gil Bóveda.

• Aromas relajantes: la experta recomienda utilizar velas aromáticas o difusores con aceites esenciales como lavanda, canela o eucalipto para crear una atmósfera de tranquilidad.

• Texturas agradables: añade mantas suaves y cojines de tejidos naturales en tu sala de estar o dormitorio para ofrecer una sensación de calidez que invite al descanso.

Y hablando de descanso, démosle el lugar que se merece: es mucho más que una pausa entre nuestras responsabilidades. Es una herramienta poderosa para recuperar la energía y mantener el bienestar físico y mental. El otoño, con su ritmo más lento y su ambiente acogedor, nos trae la oportunidad perfecta para integrar el descanso consciente en nuestras vidas.

Establecer límites claros entre el trabajo y el ocio, priorizar el sueño e incorporar prácticas de relajación puede transformar esta temporada en una época de restauración y renovación. Recuerda: el verdadero equilibrio no se encuentra en hacer más, sino en hacer lo necesario para mantener una vida saludable y plena.