obituario
Carmen Martínez, una profesora vocacional de Latín muy querida por sus alumnos y compañeros
La mujer de Enrique Valdivieso, fallecida el domingo con su marido en Sevilla, se jubiló cuatro años después de lo que le correspondía y durante más de tres décadas fue docente en el instituto Luca de Tena, donde promovió intercambios con institutos de Roma y Nápoles
Hallan muertos en su vivienda de Sevilla al catedrático Enrique Valvivieso y a su mujer
La catedrática de Latín Carmen Martínez (primera por la derecha) junto a compañeros del instituto Luca de Tena
Carmen Martínez, que falleció este domingo en Sevilla a la edad de 78 años junto con su marido, el catedrático e historiador de arte Enrique Valdivieso, fue durante muchos años profesora de Latín y Cultura Clásica en el instituto Luca de Tena de ... la capital andaluza. Llegó al centro a finales de los años 70 procedente de Canarias, donde estaba destinado Valdivieso, e hizo toda su carrera docente en ese centro sevillano, donde permaneció más de treinta años, hasta su jubilación en 2010. Se pudo jubilar a los 60 años pero retrasó cuatro años su retiro en una muestra más de lo vocacional que era para ella la docencia y el amor por el mundo clásico. Dicen sus compañeros que estaba completamente entregada al trabajo y que le entusiasmaba poder transmitir sus conocimientos a sus alumnos.
Cuenta José María Pedernal, que se jubiló hace unos meses como director de este centro educativo, que «Carmen era una mujer encantadora y muy apreciada por los alumnos y los profesores. El Luca de Tena inicio su andadura en 1979 como extensión del Beatriz de Suavia, y ella llegó poco después al centro. He sentido muchísimo su muerte. Era una profesora muy querida que, se desvivía por los alumnos». Cuenta Pedernal que junto con otra compañera María Angeles Salas, «promovió unos intercambios de sus alumnos de bachillerato con institutos de Nápoles y Roma. Lo han hecho durante muchísimos años y muchos alumnos los recuerdan como una las mejores experiencias de su adolescencia».
De hecho, durante uno de esos intercambios con Italia se produjo una erupción volcánica, recurrentes en el caso del Etna y del Stromboli, y ella y sus alumnos tuvieron que regresar a España en autobús porque se suspendió el tráfico aéreo por la s cenizas acumuladas
«Siguió manteniendo la vinculación con el Luca de Tena y hacíamos un cocido todos los años al que nunca faltaba, a pesar de que hacía ya casi 15 años que se había jubilado. Nacida en 1946, muchos de sus alumnos se han dirigido al colegio en las últimas horas para interesarse por su funeral y la misa en memoria de su antigua profesora«.
Cuenta también el exdirector del Luca de Tena que «Carmen se trabajo muchas veces a Enrique Valdivieso al instituto a dar conferencias y participar en las exposiciones que hacíamos«.