Joaquín Sánchez tomó teta hasta los 6 años: ¿qué es la lactancia materna prolongada?
«Lo más común en nuestra sociedad es que los niños estén meses mamando, no años», explica Alba Padró, consultora internacional de lactancia

No es la primera vez que lo cuenta pero, una vez más, Joaquín Sánchez, el futbolista, ha dejado con la boca abierta a todos tras confesar que estuvo tomando teta hasta los 6 años. Lo ha hecho en su serie documental 'La penúltima y me voy', que se emite en Antena 3. También comentó que la gente no suele creérselo, que se escondía porque sentía vergüenza y que en más de una ocasión los médicos le han comentado que sus escasas lesiones pueden deberse a ello.
«Hay muy pocos niños que con 6 años sigan tomando pecho», asegura a ABC Alba Padró, consultora internacional de lactancia (IBCLC) y una de las creadoras de LactaApp, un espacio que presta atención de forma científica e integral a las mujeres en proceso de lactancia y posparto. Y es que a pesar de haberse normalizado el amamantamiento en los últimos años, es lógico que a la población le «suene raro» eso de estar con la teta a partir de ciertas edades, tal y como reconoce la experta.
La lactancia prolongada, sin embargo, no es nueva. Y «según los estudios de la antropóloga Katherine A. Dettwyler, la lactancia natural terminaría entre los 2,5 años y los 7. Es a partir de esta edad cuando se consideraría realmente como tal«, puntualiza Padró, que reconoce con 6 años también se considera prolongada porque »lo más común en nuestra sociedad hoy es que los niños estén meses mamando, no años«.
Según los últimos datos disponibles que Padró explicó a ABC en una entrevista, el 83% de las madres salen del hospital dando el pecho a su bebé y solo un 30% sigue amamantando entre los 4 y 6 meses. «Al año, llegan una muy pequeña parte de mujeres -detalla la especialista-: apenas un 0,2%, según los últimos datos de la Generalitat de Cataluña. Por tanto, las mujeres que siguen dando la teta a sus hijos con 4, 6 o 7 años »es ínfima«.
La OMS recomienda seguir «amamantando hasta por 2 años o más». Sin embargo, los comentarios negativos al respecto están muy normalizados en la sociedad. Por eso, Joaquín reconocía que cuando iba a tomar «lo que hacía era taparme porque me daba vergüenza».
«Los menores que siguen tomando pecho a esas edades son muy conscientes de que lo que pasa porque, a veces, la gente es muy cruel y no mide sus palabras», apunta Padró. «Hay veces -continua-que se le dicen comentarios a los niños tipo 'esto no lo tienes que hacer, 'la teta es caca'... Incluso a las madres se le lanzan mensajes de que lo que tiene el niño es 'vicio'. Todo esto lo captan y los pequeños se avergüenzan no porque lo que hagan es vergonzoso sino por los comentarios desagradables que reciben».
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Sobre si existe relación entre la lactancia y las pocas lesiones que Joaquín ha tenido en su carrera como futbolista, Padró es contundente: «No existe evidencia científica». Sin embargo, sí está demostrado, tal y como recoge la OMS, que la lactancia «ayuda a que los niños sobrevivan y desarrollen todo su potencial, les aporta nutrientes importantes, reduce el riesgo de infección y disminuye las tasas de obesidad y enfermedades crónicas en etapas posteriores de la vida«.
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