El garbanzo negro de la Guardia Civil en el puerto de Valencia
El elevado tren de vida y las sospechas de algunos compañeros destaparon la presunta relación con la mafia albanesa del oficial de la Benemérita encargado de luchar contra la llegada de cargamentos de cocaína a la sede marítima de la capital del Turia
El capitán de la Guardia Civil implicado en narcotráfico guardaba 90.000 euros en casa
Siempre era el primero en llegar cuando se descubría un alijo. El interés que depositaba cada ocasión en la que se hallaba un cargamento suscitó las sospechas de muchos de sus compañeros del Instituto Armado. De hecho, no recuerdan verle entre muelles y ... contenedores por ningún otro motivo, lo que alimentó más si cabe las miradas indiscretas y los rumores sobre su elevado tren de vida.
Con este caldo de cultivo, se cocinó la operación gestada por miembros del Servicio de Asuntos Internos (SAI) para detener a Jesús Fernández Bolaño, capitán de la Guardia Civil y encargado de la vigilancia antidroga del Puerto de Valencia, por su presunta vinculación con bandas de narcotraficantes albanokosovares que introducían toneladas de cocaína en el mercado negro europeo.
El Juzgado Central de Instrucción número uno de la Audiencia Nacional ordenó el ingreso en prisión provisional para el oficial de la Benemérita y otros tres detenidos acusados de tráfico de drogas, pertenencia a organización criminal, cohecho pasivo, revelación de secretos y omisión del deber de perseguir delitos.
El capitán de la Guardia Civil y exjefe del puerto de Valencia implicado en narcotráfico escondía 90.000 euros en casa
Los investigadores de Asuntos Internos han encontrado el dinero oculto en el techo de la cocina del chalé del sospechoso, que está en prisión
Las pruebas, según adelantó el diario 'Las Provincias', eran suficientemente sustanciales y plausibles para explicar la trama blanca. Desde dinero negro emparedado hasta múltiples propiedades pasando por 'pagos' en viajes vacacionales a destinos lujosos como República Dominicana, Miami o Venecia que destaparon lo que todos barruntaban sobre el máximo responsable de la Oficina de Análisis e Investigación Fiscal (Odaifi) de la Guardia Civil en la sede marítima de la capital del Turia.
Una suerte de 'topo' para la mafia albanesa en su carrera por dominar el mercado negro del viejo continente, que se valía de su condición de principal responsable contra la llegada de cargamentos ilegales a Valencia a través del Mediterráneo para, presuntamente, hacer la vista gorda con sus contenedores y lucrarse con ello.
No obstante, su prolífica suerte se esfumó el pasado 4 de diciembre cuando cayó en la trampa de los investigadores, que le seguían la pista desde hace más de un año, que propiciaron la entrega controlada de una tonelada de cocaína camuflada entre papayas y otras frutas llegadas desde Panamá con destino a un polígono industrial de la localidad valenciana de Beneixida.
Durante las pesquisas que se llevaron a cabo tras la detención del 'garbanzo negro' de la Guardia Civil portuaria, se procedió a registrar dos viviendas de su propiedad, un piso en Valencia y un chalé en la localidad de Cullera ubicado en una urbanización llamada 'El Dorado'. Una metáfora de lo que allí había escondido: hasta 90.000 euros en efectivo ocultos en el techo de la cocina y enterrados en diferentes puntos de la casa que descubrieron efectivos de Policía Nacional y Benemérita en un operativo de rastreo que duró más de doce horas y en el que utilizaron georadares, perros adiestrados en detectar 'cash' y excavadoras. Según la información que publicó el citado diario local, llegaron a desmontar una piscina portátil y vaciaron la fosa séptica hasta encontrar el dinero que ahora analizan para aclarar su posible relación con el narcotráfico.
Fuentes de la investigación señalan que el guardia civil encarcelado recibía una suerte de «paga o retribución» a cambio de asegurar que los alijos entraban por el puerto y llegaban a los diferentes destinos seleccionados a lo largo y ancho de Europa. Fernández Bolaño, además de mirar hacia otro lado de acuerdo con el relato que ofrecen las pesquisas, también ejercía de inversor aportando capital privado en alijos que después le reportaban una suma mayor de dinero.
Al margen de billetes, también se trabaja con la hipótesis de que le podían 'haber comprado' con viajes con todos los gastos pagados por todo el mundo, tanto en solitario como a veces con su familia, cuyas pruebas según la investigación se recabaron gracias a escuchas telefónicas autorizadas por el Juzgado Central de Instrucción número uno de la Audiencia Nacional, el mismo órgano que investiga al exjefe de antiblanqueo de la Policía Nacional de Madrid al que descubrieron veinte millones de euros emparedados en su chalé de Alcalá de Henares. No obstante, la Fiscalía Antidroga advierte de que ambas operaciones no guardan ningún tipo de relación.
Caso Desguaces
La operación contra el mando del Instituto Armado y el resto de la banda de narcotraficantes comenzó hace más de un año cuando Asuntos Internos puso sus ojos sobre su alto nivel de vida, impropio de un guardia civil, aunque no era la primera vez que su nombre aparece vinculado a una presunta trama delictiva. Cuando desempeñaba el cargo de jefe de la Policía Local de Caravaca de la Cruz (Murcia) fue investigado por la supuesta desaparición de cientos de coches del depósito municipal que eran portados a desguaces sin licitación, en el denominado caso Desguaces.
Por ello, dejó su puesto y regresó a la Benemérita, donde años atrás había solicitado una excedencia. Así, fue a parar en 2013 al Puerto de Valencia como teniente jefe del resguardo fiscal para controlar la entrada de mercancías ilícitas en la dársena de la tercera capital española. Finalmente, la causa fue archivada por el Ministerio de Defensa.
Fuentes de la Guardia Civil apuntan que el agente se encontraba activo en el Cuerpo, pero sin destino después de haber ascendido de teniente a capitán a mediados de este año, después de una década al frente de la oficina de investigación fiscal en la sede portuaria. Durante todo este tiempo, su entorno desliza que Fernández Bolaño cuenta con el récord de operaciones contra el narcotráfico y que ha sido condecorado una decena de veces por importantes incautaciones de droga en el Puerto de Valencia, entre ellas con medallas al mérito blanco y una cruz de plata en este 2024. Según 'Las Provincias', la defensa del oficial sostiene su inocencia y confía en poder aclarar su situación una vez se levante el secreto de las actuaciones.
La causa fue declarada secreta por el titular del Juzgado Central de Instrucción número 1, Francisco de Jorge, al frente de la investigación junto a la Fiscalía Antidroga y el SAI. Un caso del que destacan su extraordinaria dificultad puesto que, en paralelo, la Policía explotó su propia operación dirigida por un juzgado valenciano. Asimismo, la propia Fiscalía Antidroga ya reclamó el año pasado en su memoria más esfuerzos para proteger los puertos de la llegada de cargamentos de droga, en especial relevancia en recintos marítimos como Valencia, Barcelona, Algeciras y Vigo. Sobre la capital del Turia, alertaba de que ha conseguido escalar al podio de dársenas europeas, sólo detrás de Amberes y Rotterdam, con mayor número de incautaciones de cocaína, con más de 12.500 kilos intervenidos en 39 contenedores, 23 de ellos llegados desde Ecuador.
Por su parte, el Departamento de Seguridad Nacional reflejó en su último informe anual que el tráfico de cocaína continúa representando «uno de los desafíos fundamentales para las autoridades en España», con un sustancial aumento en 2023 del 142% respecto al año anterior, al alcanzar 141.765 kilos de esta droga incautada por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria.
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