El curso más complicado doblegó al Covid-19 y a los agoreros

En primer lugar los estudiantes , que recuperaron algo de la normalidad perdida con el inicio de la pandemia. También los padres , que pudieron volver a conciliar al no tener a los niños en casa. Y los docentes , que tuvieron que adaptarse en tiempo récord a un sistema de docencia online que, aunque desarrollaron con nota, echaban en falta el aula.

La crónica del curso Covid es la del éxito del esfuerzo colectivo . De todos, los miembros de la comunidad educativa. De la Junta, de los docentes, de los alumnos, de los padres, del personal de apoyo... Entre todos han conseguido que el curso más complicado que se recuerda haya acabado con las mejores calificaciones.

Destacan desde la Consejería de Educación que este año sumaron 8.709 docentes al sistema para gestionar los desdobles de clases , las tareas de prevención o la asistencia a los alumnos. Eso ha provocado una bajada de la conflictividad y un aumento del rendimiento escolar, destacan tanto la Junta como los sindicatos. Y también ha provocado que Andalucía tuviera este año la mayor cantidad de profesores de la historia: 107.000 los docentes que han dado clases a los más de 1,8 millones de alumnos del sistema andaluz.

También se invirtió en refuerzos de limpieza, en 460 nuevos orientadores en personal para los centros de Educación Especial ... Destacan desde Educación, además, la compra de 98.000 portátiles que salvaran la brecha digital cuando desde el Ministerio «no ha llegado ni uno solo de los que comprometieron».

Aunque la aún secretaria general del PSOE andaluz, Susana Díaz , llegó a acusar a la Junta el pasado septiembre de «no garantizar la seguridad» de los estudiantes , la realidad es más tozuda que la política y demuestra que, a la postre, la apuesta por la presencialidad fue un acierto completo.

Desde el sindicato Csif creen que el profesorado se merece un «sobresaliente cum laude», porque los docentes han sido quienes, «a pesar de los temores e incertidumbres, han hecho muy bien su trabajo». Destaca Elena García, delegada de Educación del sindicato que «Andalucía le debe una a los profesores» porque su esfuerzo «ha sacado a flote el curso escolar», garantizando además la conciliación. «Si los centros no hubieran estado abiertos no podría haber salido adelante la economía andaluza», destaca.

Para García, el mismo mérito tienen los alumnos. «Nos han dejado de piedra porque han sabido adaptarse a la situación, primero de confinamiento y luego de clases con mascarillas y medidas contra el coronavirus», señala.

Francisco Padilla, presidente del sindicato educativo ANPE coincide con García. El refuerzo de profesores ha sido clave en este curso de diez. «Nos ha permitido mantener las distancias, desdobles de cursos, apoyos educativos... » Para Padilla también ha sido básica la actitud de los docentes «que han sabido adaptarse».

«Hablamos del profesor pero en realidad toda la comunidad educativa ha estado a la altura de las circunstancias», destaca el presidente de ANPE, que incluye ahí a los padres y a los alumnos. «Yo nos doy a todos un notable alto» , bromea.

Con un acuerdo casi unánime en que el curso ha sido un éxito, todo el mundo tiene los ojos ya en septiembre . La vuelta a las aulas entonces será diferente. Tiene que serlo porque será un curso con vacunas, con menos miedo.

Dentro de la comunidad educativa hay consenso en pedir para el próximo año que se mentengan, dentro de lo posible, los refuerzos docentes. Es lo que opinan desde Csif y desde ANPE y es una idea que desde la Consejería de Educación comparten. Sin embargo, señalan desde el departamento que dirige Imbroda que es posible que no se pueda mantener a todos los profesores extra que se contrataron, aunque sí se están buscando fondos para mantener al máximo posible.

La pandemia, que desbarató el final del pasado curso, ha marcado este en todos los aspectos. Pero, según avanza el proceso de vacunación —en agosto se espera que se inmunice a los alumnos mayores de 12 años—, el Covid-19 tendrá cada vez menos protagonismo en las aulas.

Aunque la crisis sanitaria ha traído mucho malo, es algo de lo que aprender, indican profesores y demás actores de la comunidad educativa. Ha supuesto ponerse al día en docencia telemática , adaptarse a un entorno cambiante... El curso más complicado que se recuerda, fruto del esfuerzo de todos, no ha dado casi noticias. Y eso es una buena noticia.