Barbate reivindica su singularidad y reclama al Estado una deuda histórica de 411 millones de euros

ABC ha consultado el documento aprobado por el Ayuntamiento de Barbate que analiza la situación del municipio, sus problemas endémicos y su carta a las Administraciones para salir de la maltrecha situación que soporta. En el mismo reivindica que se reconozca su especial singularidad y que se salde lo que se considera una deuda histórica.

Este municipio gaditano, con 23.000 habitantes, tiene una extensión de 143 kilómetros cuadrados. La población barbateña se distribuye entre el núcleo urbano, la entidad local autónoma de Zahara de los Atunes, la pedanía de Caños de Meca y otros diseminados como Zahora o la Sierra del Retín.

Tradicionalmente Barbate ha sido una población pesquera pero las consecutivas crisis del sector han hecho que la población se haya tenido que plantear una diversificación en sus actividades económicas. Las pesquerías están en retroceso por las restricciones del caladero marroquí además. La industria conservera y de salazón también ha ido decayendo, por lo que el sector servicios es en la actualidad la actividad más importante. A la misma se dedica el 70% de la población activa ocupada, según dicho documento. La dependencia del turismo es importante, aunque es muy estacional, por lo que cuando no es temporada alta, los ingresos se hunden.

El informe recoge un apartado especial para el narcortráfico, un problema que se define «como la peor lacra que padece la sociedad barbateña desde los años 80. Por desgracia, otra vez más, Barbate es referente internacional por el narcotráfico ante el inhumano y ruin asesinato de dos guardias civiles en el puerto por parte de unos desalmados el 9 de febrero».

«Si realizamos una búsqueda puntual de texto en el buscador de internet de referencia (Google.com) sobre las palabras 'Barbate narcotráfico', nos muestra 3.950 resultados en 0,24 segundos», destaca el documento, en el que se asume que el municipio «sufre una constante actividad ilícita» por el narcotráfico. «Las consecuencias son devastadoras para la construcción de una sociedad próspera y enriquecedora», añade.

Los motivos, según se argumenta, son su situación geográfica y una tasa de paro del 27,6%, 14,2 puntos por encima de la media nacional. A eso hay que sumar otros problemas de envergadura que hacen del narcotráfico un caldo de cultivo perfecto para ganar adeptos, como una tasa de abandono escolar del 17,8%, cuatro puntos más que la media del país.

El modelo del 'narcobienestar' ha calado además en un sector de la población. «Las constantes alusiones a modelos de vida exitosa alrededor del narcotráfico a través de la difusión cultural y social cada día están más presentes en películas y series de televisión en la última década. Barbate también forma parte de estas referencias que idealizan a personajes que disfrutan de éxito económico y de reconocimiento social a través del narcotráfico. Este tipo de referencias ayudan, desafortunadamente, a la normalización del narcotráfico en el seno de la sociedad barbateña», se indica.

Al respecto, se pide que la presión policial no cese y que se tomen medidas de prevención «para evitar crisis como la actual tras lo ocurrido en febrero». Entre las prioridades, reclama la reactivación de la unidad de élite de la Guardia Civil OCON-Sur, que tantos éxitos cosechó en esta lucha.

Seguimos. La renta per cápita de Barbate es de las más bajas de la provincia y el Ayuntamiento, en una situación ruinosa, no puede prestar servicios públicos «de manera eficaz» ni llevar a cabo acciones sociales de formación, empleo y educación que alivien esta dramática situación. El nivel de endeudamiento de las arcas municipales supera el 345% y la deuda con Seguridad Social y Hacienda ronda los 10 millones.

El Gobierno expropió en los 80 la Sierra del Retín para un campo de adiestramiento de la Armada, algo por lo que Barbate no recibe ninguna compensación económica como sí ocurre por ejemplo en las Bárdenas Reales de Navarra o en Rota, una servidumbre que ha lastrado el desarrollo «económico, urbanístico y turístico» del municipio.

Por ello, defiende que el Estado tiene «una deuda histórica» con Barbate ya que la ocupación de El Retín ha impedido su desarrollo socioeconómico, urbanístico y turístico; por las molestias que soportan los residentes, por el agravio comparativo existente con otros municipios españoles y por el impago durante cuatro décadas de tributos municipales.