ajuste de cuentas
La carta de Larry Fink
El jefe de BlackRock advierte en su mensaje anual de una crisis de las jubilaciones y una guerra generacional
Unilever tiene un plan para deshacerse de Ben & Jerry's (24/03/2024)
Manipulación del concierto (20/03/2024)

Larry Fink (Los Ángeles, 1952) es el presidente y consejero delegado de BlackRock, el mayor fondo inversor del planeta con 9 billones de dólares en activos. Hablamos del mayor inversor en España donde tiene 47.000 millones de euros invertidos en 71 ... empresas cotizadas. Cada año escribe una carta a los partícipes de su fondo que es estudiada por el mercado como un evangelio corporativo. Fink ha conseguido, por ejemplo, que los famosos criterios ESG (sostenibilidad medioambiental, social y buena gobernanza) se popularizaran en Wall Street. En los últimos años, ha escrito sobre los incentivos al cortoplacismo, ha criticado la globalización, ha debatido sobre los objetivos empresariales y ha pontificado sobre el cambio climático.
Este año Fink ha dedicado su carta a lo que considera la crisis de las jubilaciones en un mundo envejecido. Según la ONU, en 2050 una de cada seis personas tendrá más de 65 años frente a una de cada once hace cinco años. Afirma que el envejecimiento está ejerciendo una gran presión sobre la seguridad social y los sistemas sanitarios, y que este problema no hará más que agudizarse gracias a los avances médicos, como los medicamentos para bajar de peso (Ozempic y Wegovy) que prolongarán la vida humana de manera más saludable. «Como sociedad, dedicamos una enorme cantidad de energía a ayudar a las personas a vivir una vida más larga. Pero ni siquiera una fracción de ese esfuerzo se dedica a ayudar a la gente a financiar esos años adicionales», afirma.
Fink escribe desde una perspectiva norteamericana. Una encuesta de 2023 realizada por Payroll.org indicó que el 78% de los estadounidenses viven al día, sin posibilidad de ahorrar. Otra encuesta de la Oficina del Censo descubrió que casi la mitad de los estadounidenses entre 55 y 65 años no han ahorrado para su jubilación. Pero los desafíos que plantea son los mismos para países con estados de bienestar desarrollados que garantizan pensiones más generosas.
El jefe de BlackRock no habla desinteresadamente. La mitad de los activos que gestiona sonde fondos o planes de pensiones, individuales y colectivos. Una apelación a la necesidad de ahorrar más para la jubilación y a recurrir a la capitalización para financiar los años extras que vivimos sólo puede suponer más negocio para Fink. Pero esto no desmiente el hecho de que el problema está llamando a a la puerta.
Fink se hace eco del enfrentamiento generacional que empieza a producirse, básicamente por la capacidad de los más viejos de seguir extrayendo recursos de los jóvenes, especialmente a través de las pensiones de reparto. «No es de extrañar –escribe– que las generaciones más jóvenes, los Millennials y la Generación Z, estén angustiadas económicamente. Creen que mi generación (los Baby Boomers) se ha centrado en su propio bienestar financiero en detrimento de quién vendrá después. Y en el caso de la jubilación, tienen razón». Y la tienen, al margen de que el sistema de pensiones sea público o privado, de reparto o de capitalización.
jmuller@abc.es
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete