El PP reprocha la injerencia de Alegría con los móviles y pide que se ocupe de PISA

A raíz de este anuncio, la ministra envío una carta a los consejeros proponiendo una normativa lo más cohesionada posible teniendo en cuenta que está regulación es competencia de las comunidades.

Lo que se puso también sobre la mesa este miércoles es el informe del Consejo Escolar que descarta el uso del móvil en Infantil y Primaria salvo razones de salud o circunstancias personales o familiares, mientras que para Secundaria sí se permite a los chavales tenerlos con ellos pero apagados desde la entrada hasta la salida del centro y también con la excepción de la salud o si el profesor lo autoriza por fines educativos.

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Las comunidades del PP ya mostraron su disconformidad con la reunión, incluso antes de entrar. Fuentes del partido señalaron a ABC que Alegría «llega tarde» y que el uso de móviles es «competencia de las comunidades autónomas».

«La regulación del uso de los móviles no es competencia del ministerio sino de las comunidades», dijo en nombre de los consejeros de las regiones gobernadas por el PP. «Ya hemos establecido una regulación en este sentido, por tanto, Educación quiere aprovechar el trabajo serio y riguroso ya hecho para obtener rédito político», ha criticado.

Además, ha señalado que el pasado día 13 de diciembre «pedimos al ministerio una reunión monográfica para analizar los datos de España en PISA y que se ha reiterado por carta pero no obtuvimos respuesta y esto sí es competencia del ministerio», se quejó el consejero. Respecto a las declaraciones del ministerio, que siempre han insistido en que respetan las competencias, el consejero replicó: «¿Pero es el papel del ministerio entrar en ese ámbito? Esa regulación ya existe», insistió.

A la reunión han asistido 10 comunidades en formato presencial y 6 por videollamada. De todas ellas, solo ha habido tres consejeros de Educación: Cataluña, Navarra y Asturias. En el resto de comunidades han estado directores generales o viceconsejeros, salvo en el caso del País Vasco que no se ha presentado ni en presencial ni por videollamada.

En este caso, fuentes de la consejería vasca han señalado a este periódico que ya se reunieron de forma bilateral con el ministerio y en dicho encuentro ya le contaron a Alegría cuáles eran sus planes respecto a los móviles, motivo por el que no vieron necesario acudir a la reunión de este miércoles. País Vasco es la única comunidad que se desliga del resto en cuanto a qué hacer con el móvil. «El establecimiento de normas de uso de los dispositivos móviles se encuentra dentro del margen de autonomía de organización y funcionamiento de los centros, atendiendo siempre a las especificidades y al contexto de cada uno de ellos». Así lo anunciaron en un comunicado posterior a una rueda de prensa el pasado 18 de enero.

«No estamos de acuerdo en la prohibición por la prohibición e insistimos en la autonomía de los centros; son estos los que deben reflexionar con su comunidad escolar, es decir, padres, profesores, directores, etc». Así, han remitido una serie de orientaciones «en función de lo que haya decidido cada centro -prohibición o no- y hemos planificado una formación permanente para el profesorado durante todo el curso para cuestiones vinculadas con el móvil. Y ya en septiembre continuaríamos con esa formación pero para las familias, de manera de que antes de que termine 2024 todos tengan el reglamento relativo al uso de móviles», apuntan fuentes de la consejería vasca.

En Cantabria, la situación es parecida pero no exactamente igual: «La consejería ha ido dando diferentes pasos en los últimos meses. El primero de ellos fue incluir una recomendación de regulación del uso de dispositivos móviles en las instrucciones de inicio de curso que envío a los centros y a continuación ha tratado de abrir un debate en la comunidad educativa y conocer la opinión de los centros. El cien por cien de los centros que imparten Secundaria ya lo tienen regulado y los centros de Primaria nos transmiten que no verían mal una prohibición, por lo tanto sí que estaríamos abiertos a incluir esa prohibición en instrucciones a los centros», señalan fuentes de la consejería.

La consejería de Educación de Andalucía envió un comunicado en el que señaló que los centros educativos andaluces ya cuentan con unas instrucciones desde el pasado 4 de diciembre por lo que lamentan que el Gobierno central vaya «una vez más muy tarde y a remolque de las iniciativas que adoptan los gobiernos autonómicos, cambiando de forma radical la postura que había mantenido inicialmente». También lamentaron, como señaló el consejero de Murcia, que se haya ignorado la petición de una Conferencia Sectorial «para trabajar sobre los graves problemas que sufre el sistema educativo español, a tenor de los últimos indicadores de evaluación».

En la misma línea, la Comunidad de Madrid señaló que «el acuerdo general sobre el uso de dispositivos móviles en centros escolares, que la ministra Pilar Alegría ha presentado a las comunidades llega muy tarde para Madrid, que ya recoge en su normativa la prohibición de teléfonos y otros dispositivos electrónicos durante toda la jornada escolar desde el curso 2020/21».

Pero no todo fueron críticas. Lydia Espina, consejera de Educación del Principado de Asturias dijo que «las etapas iniciales de Infantil y Primaria deben ser espacios libres de móviles pero también sabíamos que aquí, al menos en Asturias, no había debate en este sentido porque el uso es residual. En cuanto a ESO, Bachillerato, FP y resto de enseñanzas superiores entendemos que se debe de regular, estamos de acuerdo con la propuesta del ministerio, que es muy valiente al buscar el consenso y respeta a todas las comunidades: las que hayan regulado, las que lo estén haciendo y las que otras como nosotros estamos pendientes de sacar una resolución».

Anna Simó, consejera de Educación de la Generalitat ha valorado positivamente «que pueda haber encuentros donde podamos explicar qué soluciones y respuestas hemos adoptado los diversos territorios del Estado». También ha transmitido que «el uso de los móviles tiene muchas posibilidades y son positivas y el abuso, no».