El CEO de Emerita, sobre la mina de Aznalcóllar: «Es un asunto para empresas mucho más grandes»

Este lunes, se inicia la primera de las 40 sesiones previstas en el proceso judicial, que tiene a 16 investigados y cuenta con la petición de archivo de la Fiscalía. En paralelo, el sector minero se da cita en Canadá en su mayor convención mundial, el PDAC. Allí se encuentra, precisamente, el CEO de Emerita Resources, David Gower, quien espera que el periplo legal acabe en el tercer trimestre de 2025.

Mientras tanto, la compañía considera que no se ha realizado aún la suficiente investigación para confirmar que sea rentable explotar Aznalcóllar en el caso de que la justicia les diera la razón. «Deben completarse más trabajos para demostrar si existe una expectativa razonable de extracción comercial. La estimación de recursos minerales es histórica y no se debe confiar en ella», explicó hace unas semanas Emerita en una carta a sus accionistas.

En concreto, la firma aspira a realizar, aproximadamente, un 10% más de perforaciones para conocer con exactitud el contenido del subsuelo, por lo que «tardaría varios años en ponerla en producción».

Así lo explicó hace unos días el CEO, durante su participación en unas jornadas previas al gran evento minero en Toronto. Y, además, dio a entender que necesitarían buscar un socio o que, directamente, tendrían que vender el yacimiento si se les adjudicara.

«Yo diría que mientras avanzamos en ese proceso y conseguimos los permisos, es altamente improbable que Emerita sea la empresa que la construya, siendo honesto. Esto es un asunto para empresas mucho más grandes», explicó Gower ante un nutrido grupo de asistentes.

Estas declaraciones han sido acogidas por el sector minero como toda una declaración de intenciones: Emerita es, por el momento, una 'junior'. Así se denominan a las compañías centradas en la exploración, que habitualmente venden después sus hallazgos a otras empresas de mayor tamaño que ya sí explotan los yacimientos.

En determinados círculos, esta firma genera desconfianza. En el pasado, anunció proyectos de investigación en Cantabria, Asturias y Extremadura pero, por el momento, ninguno ha prosperado.

Recientemente, ha logrado que la Junta de Andalucía declare como inversión empresarial estratégica su proyecto 'Iberian Welt Best', que desarrollaría entre Puebla de Guzmán y Paymogo (Huelva). Este estatus se le otorgó mediante el silencio administrativo positivo y, todo parece apuntar, que se debió a un baile de plazos.

El proyecto contaba con valoraciones en contra de dos consejerías: una avisaba de que «entraña un riesgo» para el consumo de agua de Huelva y otra apuntaba a un peligro para la biodiversidad de la zona. A pesar de que la Unidad Aceleradora de Proyectos de la Junta había emitido un informe desfavorable, la minera logró esta denominación tras cruzar varios escritos con el gobierno andaluz y solicitar la certificación del silencio administrativo positivo.

Es justo en este nuevo proyecto en el que la empresa ha anunciado unos prometedores datos de recuperación de oro, unas cifras de las que recelan las fuentes mineras consultadas por este medio. Sin embargo, Emerita continúa interesada en aumentar las cuadrículas mineras en las que estudia el subsuelo y, de hecho, ha participado en los concursos convocados el año pasado para buscar nuevas minas. ¿Logrará pronto resultados firmes con los que convencer a los escépticos?

Esta semana viene cargada para el sector. Las grandes empresas mineras se dan cita en el mayor evento mundial centrado en esta actividad: el PDAC, una convención que tiene lugar en Toronto (Canadá) y que reúne a más de 27.00 participantes de 135 países.

Da la casualidad de que el juicio por la adjudicación del concurso de la mina de Aznalcóllar se inicia esta misma fecha. Previsiblemente, las sesiones de este proceso se extenderán hasta julio. La Fiscalía ha pedido en varias ocasiones que se archive esta causa y que se absuelva a las 16 personas investigadas al considerar que no hay indicios de delito.

De su lado, la acusación particular la ejercen Emerita Resources, Ecologistas en Acción y Andalucía Mining. Entre tanto, el adjudicatario para devolver la actividad minera a Aznalcóllar continúa a la espera de que el gobierno andaluz le dé la luz verde definitiva para explotar el yacimiento.

En el municipio sevillano de Aznalcóllar lleva años trabajando Minera Los Frailes, la filial creada por Grupo México para operar esta mina. Esta empresa es un gigante dedicado a la actividad extractiva y al ferrocarril en Latinoamérica y este sería su primer proyecto en el Viejo Continente.

Por el momento, ha completado todos los permisos ambientales para iniciar la actividad, pero la autorización definitiva para operarlo se ha demorado más de lo previsto. El consejero de Industria, Energía y Minas, Jorge Paradela, vaticinó en verano que la autorización minera llegaría antes de que acabara el año.

Una vez que logre completar la maraña administrativa, Los Frailes prevé alcanzar la primera cámara de mineral alrededor de 2027. Para ello, construirá primero una planta para tratar el recurso así como balsas y canalizaciones. La inversión global se estima que superará 450 millones de euros, según cifras de la empresa.