El fiscal que lucha contra ciberdelitos en Sevilla: «He tomado declaración a personas convencidas de que Brad Pitt o Diane Kruger les hablan»

-Últimamente están proliferando las denominadas «estafas amorosas». ¿Hay mujeres que pueden creerse realmente que están hablando con Brad Pitt?

-Sí, hay personas muy solas que se lo creen. Yo he he estado tomando declaración a víctimas y, por más que le hemos dicho que esta persona es una actriz muy famosa, por ejemplo, Diane Kruger, no quieren aceptar que no ha sido ella sino un estafador con el que han estado hablando.

-Resulta casi enternecedor...

-Sí. La soledad de la gente o la falta de cariño pueden llevar a no querer aceptar que han sido engañados de esa manera. Estas personas no tienen ningún problema mental, simplemente están muy solas. Y se lo creen. Les decimos que son actores muy famosos, con una carrera importante, y que no necesitan dinero. ¿Cómo les van a pedir 1.000 euros?

-¿Y qué les dicen?

-Nos dicen que estamos equivocados y que Brad Pitt se ha enamorado de ellas. O que están convencidos de Diane Kruger se ha vuelto loca por ellos. Y que hablan con ellos. Pero un día les dicen que necesitan 500 euros y, a los tres días, otros 500. El montaje parece chapucero, siempre ponen la misma foto, pero hay gente que pica y va pagando hasta que el tema explota. Hay otras estafas económicas que no apelan a los sentimientos amorosos sino a la codicia de la víctima, cuando se le ofrecen rentabilidades increíbles por su dinero mes a mes. Estos montajes están mucho mejor preparados con apps falsas en las que se aprecia cómo va creciendo supuestamente tu saldo en la cuenta mes a mes. Pero es algo irreal y uno se da cuenta de la estafa cuando trata de recuperar la inversión. No hay cuenta ni dinero.

-A mi móvil suelen llegar mensajes de un paquete supuestamente a mi nombre retenido en la aduana y también de sanciones de Tráfico que puedo anular entrando en un enlace, aparte del mensaje del hijo en apuros que ha perdido el móvil y te pide dinero. ¿Están detectando nuevas estafas telemáticas?

-La del hijo en apuros es quizá la más frecuente en este momento, pero también estamos detectando la denominada «man in the middle». De alguna manera, los estafadores acceden al correo de una empresa y manipulan sus facturas para que les envíen el dinero que le deben a otra empresa a su cuenta corriente. Lo que hacen para cometer la estafa es enviar un segundo correo al pagador, inmediatamente después de la emisión de la factura real. Este segundo correo es idéntico al primero, con la misma procedencia, y solo cambian el número de cuenta corriente. Alegan que ha habido un error en la cuenta del primero correo (el verdadero) y piden que envíen el dinero al número nuevo. Entre empresas se dan un margen de tiempo para los cobros y no preguntan por el dinero que no les ha llegado el dinero hasta pasados unos días, de lo cual se aprovechan los malos. Y el dinero ya ha volado hacia el extranjero o se ha convertido en criptomonedas.

-¿Los «malos» están cada vez más formados en sus malas artes?

-Sí. Estos delincuentes son muy hábiles, tienen muchos conocimientos técnicos y son capaces de falsificar incluso un certificado de titularidad de la cuenta. Cualquier móvil te permite una VPN, es decir, enmascarar el lugar desde donde te estás conectando. Hay fraudes muy complejos y suelen ser los más lucrativos. He visto facturas falsificadas de 500.000 euros.

-¿Tienen constancia de que se esté empezando a utilizar la Inteligencia Artificial (IA) con estos fines delictivos?

-Sí. En temas económicos, en temas sexuales y en temas contra las personas. La IA es capaz de crear un «selfie» en movimiento con el que es posible abrir una cuenta bancaria con identidad falsa. Si el malo consigue un DNI de otra persona, puede coger esa imagen y, con un programa de IA, poner a esa persona en movimiento. Así logra una cuenta a nombre de una persona controlada por él. Hay programas que pueden hacer decir a una tercera persona lo que quiera el delincuente partiendo de una grabación de la voz de esa persona.

-¿Se lo podrían hacer a un juez o a un fiscal?

-Sí, a cualquiera. A mí mismo. Si tienen una grabación de mi voz pueden hacerme decir cualquier barbaridad con un programa de IA. Y también se puede hacer con fines sexuales como el famoso desnudo de Almendralejo. Yo he visto montajes de este tipo, el original y la falsificación, y son indistinguibles. El método resulta sencillo con IA: se coge una imagen de una chica en abierto en Instagram y se cambia a un desnudo. Y esas imágenes distribuidas masivamente por Internet hacen mucho daño. Lo de Almendralejo se está extendiendo por toda España. Y quienes lo hacen, a veces menores de edad, se sorprenden de que eso sea un delito. También hay personas que ven pornografía infantil y que se sorprenden de que eso se considera un delito. Hemos tenido varios casos en Sevilla de uno y de otro. Eso se llaman actos preparatorios y mucha gente sigue sin tener conciencia de que también son delitos. También son bastante habituales las «fotopene», el envío a otra persona de la foto de tus genitales.

-¿Eso también es un delito?

-Antes no, pero ahora sí. Se están creando nuevos tipos delictivos a medida que vamos detectando este tipo de comportamientos. De hecho, cada año proponemos nuevos tipos para frenarlos.

-¿Es un delito con pena de cárcel?

-No. Se trata de un delito leve con una pena menor. Pero puede exigir una localización permanente e implica antecedentes penales, lo cual limita al condenado a la hora, por ejemplo, de hacer una oposición a la administración.

-¿Hacer una fotografía a un bebé desnudo, aunque sea tu hijo, puede también ser delito?

-Si las poses fueran explícitamente sexuales, sí. En todo caso, depende del contexto de esa imagen, a quién se la envíes y con qué comentarios. Y si se pide algo a cambio. Hemos tenido condenas en Sevilla de un padre por mandar una foto de su bebé desnudo a cambio de otra foto de otro bebé desnudo.

-Con la aprobación de la ley del sí es sí, un beso no consentido pasó a ser una agresión sexual.

-No sólo un beso no consentido, también tocarle el pecho o las nalgas a una mujer, algo que antes estaba considerado un abuso sexual, no una agresión. Esa ley unificó todos estos comportamientos y los considera todos agresiones. Estos comportamientos se han metido en el mismo paquete que una violación por vía vaginal con intimidación o trato especialmente degradante. Para mí es algo que no se puede equiparar. ¿Es algo que se debe castigar? Sí, por supuesto, porque atenta contra la libertad sexual de una persona. Pero no se puede equiparar con una violación.

-¿Rubiales podría ir a la cárcel por el beso que le dio a Jenni Hermoso tras la victoria de España en el Mundial femenino de fútbol?

-Podría ir, aunque no lo creo. Pero si no recuerdo mal, también se le acusa de coacciones. Y entonces serían dos delitos y podría elevar la pena.

-La mayoría de españoles y españolas no considera que ese beso -en ese contexto de celebración- merezca una pena de cárcel. ¿No cree que el Código Penal se ha alejado un poco de la percepción social mayoritaria?

-Hay gente que lo considera invasivo y gente que no. Con esto ocurre como con un piropo callejero. Mucha gente no lo percibe como algo malo pero hay que asumir que nadie se debe dirigir a un desconocido para decirle algo sobre su físico, sea bueno o malo. Tampoco hay que tocar a los demás. Hay gente que no le gusta que le den un abrazo.

-¿Hay que tener cuidado también con los abrazos que podamos dar a un desconocido para no toparnos con el Código Penal?

-Sí, pero con conocidos también (ríe). No hay que dar un abrazo a nadie que no te lo pida. Tampoco creo que tenga más importancia, puede incomodar pero ya está. Otra cosa es restregarse en el metro o en el tranvía.

-Quizá antes hemos sido muy permisivos con esos comportamientos machistas y repugnantes, que se perpetraban impunemente. ¿Es posible que por reacción a esa impunidad nos hayamos pasado un poco de rosca con la nueva legislación?

-A mí no me parece mal que se regulen todas las conductas invasivas y que se castigue cualquier invasión de tu intimidad. Ese señor que le ponía una mano en el muslo a la mujer que tenía al lado en el autobús me parece que está bien detenido y bien llevado a una comisaría. No creo que vaya a ir a prisión por eso, pero sí servirá para que no lo vuelva a hacer.

-En Andalucía se habrá dado cuenta de que somos muy «besucones». Supongo que al principio le chocaría.

-Sí, me chocaba un poco, pero en Andalucía eso es un síntoma de cercanía. Yo soy castellano pero llevo ya siete años aquí y me ha adaptado perfectamente a los usos. Si las dos personas están de acuerdo, adelante. Pero imponer tus usos a los demás tampoco debe hacerse.