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Crónica

Nile Rodgers, el rey Midas del pop que invita a bailar en una noche Icónica

El músico americano repasa sus grandes éxitos al frente de Chic y con otros artistas

Nile Rodgers: «Grabar con David Bowie 'Let's Dance' en 17 días fue una locura divertida»

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Nile Rodgers derrochó simpatía y genialidad en Icónica Sevilla Fest
Nile Rodgers derrochó simpatía y genialidad en Icónica Sevilla Fest juan flores
Andrés González-Barba

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La Plaza de España se convirtió anoche en una inmensa pista de baile con sabor a los años setenta para recibir a uno de los músicos más influyentes del último medio siglo: Nile Rodgers. El líder de Chic saltó a la arena de Icónica Sevilla Fest –que patrocina ABC– prometiendo desde el principio una noche muy movida y con mucho bailes. Su traje de chaqueta rojo a juego con los vestidos de las cantantes ya prometía una velada llena de calor y decibelios.

La primera canción que sonó fue 'Le Freak', single de Chic que vendió millones de copias en la década de los setenta. El espíritu festivo y discotequero de aquella gloriosa década estuvo representado por otros clásicos imprescindibles de la banda, como 'Everybody Dance', 'Dance, Dance, Dance' y el imprescindible 'I Want Your Love', donde la cantante Kimberly Davis se lució con un ejercicio vocal sobresaliente, aportando un toque soulero excepcional.

A partir de ahí, Mr. Rodgers repasó con una gran modestia su carrera musical no sólo como compositor y productor de todos los temas de Chic, sino también como el hacedor del éxito de otros muchos artistas como Diana Ross, Madonna, David Bowie, Daft Punk, Duran Duran, Lady Gaga y un largo etcétera. La primera de las canciones que fueron interpretadas en el concierto y que Rodgers 'regaló' a otro gran artista fue 'I'm Coming Out', que popularizara en su momento Diana Ross. Sin solución de continuidad, como si se tratara de una gran cascada llena de nostalgia, arrancaron los primeros acordes de otro himno que sonó en millones de discotecas, 'We Are Family', que popularizaran las Sister Sledge.

Los años ochenta también se colaron en el repertorio de Nile Rodgers, quien recordó cuando conoció a principios de aquella década a una jovencísima Madonna que quiso que el líder de Chic le produjera un disco que se titulaba como su primer single de presentación, 'Like a Virgin'. Ese clásico fue interpretado en un 'medley' especial junto a 'Material Girl' y al inolvidable 'Modern Love', una de las canciones más populares del disco de David Bowie 'Let's Dance' (1983), también tocado por la mano mágica de este músico inconmensurable.

Pero no sólo vive Rodgers del pasado, ya que 2022 fue uno de los años más importantes en la vida de este productor, que ganó su sexto premio Grammy gracias al trabajo que hizo con Beyoncé, cuyo tema 'CUFF IT' obtuvo el Grammy a la mejor canción de R&B.

El concierto no dejó casi tregua para respirar, ya que después de eso el público se vio obligado a bailar de forma compulsiva mientras sonaba por la Plaza de España 'Get Lucky', de Daft Punk. Tras este tema más movido, el líder de Chic recordó con mucho orgullo que con este dúo francés obtuvo un Premio Grammy hace diez años al mejor disco del año, el primero de música de baile que lo ganaba desde la banda sonora de 'Saturday Night Fever'. Entonces se produjo el clima perfecto para que despuntara otro gran clásico de Daft Punk, 'Lose Yourself to Dance'.

Otro hit imprescindible de inicios de los ochenta, 'Spacer', que popularizara Sheila & B, despuntó por el escenario de Icónica Sevilla Fest. Acto seguido, el sonido de Chic se apoderó de la noche con una de sus canciones más reconocidas, 'Soup for One'. Poco después apareció 'Lady (Hear me Tonight)', antes de dar paso a otro de los grandes himnos de los ochenta tocados por la varita de este rey Midas del pop, 'Notorious', de Duran Duran.

La noche cobró uno de sus momentos más emotivos cuando sobre la pantalla se proyectaron imágenes de Nile Rodgers junto a los grandes artistas que ha producido mientras el grupo interpretaba 'Thinking of You'. Minutos más tarde, el batería Ralph Rolle montó un show muy vistoso antes de cantar 'Let's Dance', hit que Bowie abanderara en los ochenta y que diera título al disco que grabara con Rodgers en 17 días de locura. Después de que el público lo aclamara tras 'Good Times', el grupo salió de nuevo al escenario y se despidió entre la apoteosis volviendo a tocar 'Le Freak'.

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