la suerte contraria
Sánchez 2031
El autoengaño es la antesala de la derrota y la puerta a que el sanchismo se convierta en algo estructural
El PNV y el rincón de pensar
Criaturas extraordinarias
Observo un extraño triunfalismo en el PP tras las últimas encuestas, como dando por hecho que esto está hecho y que solo hay que sentarse a esperar a que la historia contribuya con el papel que le corresponde. Y siento ser el aguafiestas, pero ... no creo que existan motivos para tanta alegría. El autoengaño es la antesala de la derrota y la puerta a que el sanchismo se convierta en algo estructural. No solo es que en la calle no se perciba nada que justifique esa euforia, sino que, además, los datos son rotundos: según la encuesta de ABC, el PP no habría sido capaz de ganar un solo voto desde las últimas elecciones y pierde tres puntos desde abril. Si además comparamos la encuesta con la que se hizo antes de las generales, podemos observar que el PP está peor que entonces y Sánchez mejor. Es decir, el punto de partida del PP ha empeorado. Y a ello hay que añadir que, previsiblemente, ese margen se estrechará aun unos cuatro puntos en campaña.
La lectura de los datos es inquietante. La oposición consolida la mayoría absoluta, oigo decir. La realidad es que el PP se estanca y Vox se dispara. Y se dispara porque Sumar pierde el tercer puesto en varias circunscripciones, pasando así una docena de diputados a Vox. Es decir: el PP está estancado y si Vox sube es solo como consecuencia de la situación coyuntural a la izquierda del PSOE. Como es más que previsible que esta situación se corrija y Sumar y Podemos alcancen un acuerdo para concurrir en un solo ticket, es cuestión de tiempo que ese triunfalismo se desvanezca.
Pero hay más. El PP sigue sumando automáticamente los escaños de Vox a los suyos, dando por hecho que, llegado el momento, le investirán gratis. Sencillamente eso no va a suceder, por lo que la única duda es si exigirán o no entrar en el gobierno. Por muchos motivos, estoy convencido de que ni a PP ni a Vox les interesa esa coalición, por lo que, en caso de sumar, iríamos a un gobierno del PP soportado por unos pactos de investidura con Vox. Bien, pues si esto es así, no entiendo por qué no lo dicen de una vez. Es evidente que les beneficia a ambos. En el momento en el que el PP admita estar abierto a pactar algunas cosas, pero que en ningún caso habrá una coalición de gobierno con Vox, se producen varios efectos beneficiosos para ambos. A saber: Vox gana votos aupado por sus propios votantes, que desprecian al PP y que querrán dar a su partido más poder para dicha negociación; además, los votantes de derecha moderada que no quieren un gobierno con Vox y se iban a quedar en casa, irán a votar al PP, ya sin miedo; y los desencantados del PSOE se abstendrán al no existir riesgo de un gobierno de Vox.
Los resultados que muestra la encuesta solo sirven para hipermovilizar a la izquierda y evitar así que el PP lleve a Vox al gobierno. No aprenden. Y no pasaría nada si no fuera porque lo que nos estamos jugando es la nada remota posibilidad de que Sánchez llegue hasta 2031. Y eso solo si no quiere seguir más tiempo. Así que menos triunfalismo, que vienen curvas.
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