duelo en la familia catalana
La «saga Bultó», gasolina y velocidad en el ADN
El malogrado Álvaro Bulto, que ha perdido la vida mientras practicaba «wingfly», era un deportista nato, como el resto de sus nueve hermanos y su padre, fundador de la cadena de motos Montesa, después convertida en Bultaco
Mentar la saga Bultó es evocar más de un siglo de pasión por la velocidad y la gasolina. No es de extrañar así que esta prolífica familia, que ha "mamado moto" desde la infancia, consolidara en pocos años un clan con nombre propio dentro del motociclismo español e internacional. En la génesis de la dinastía motera está F rancisco Javier Bultó, Paco , un emprendedor procedente de una familia dedicada al textil que pronto se entregó a sus dos pasiones reales, la familia y las motos, y que supo transmitir a sus numerosos descendendientes ese entusiasmo irracional por el motor, una combinación que en su caso armonizaba tradición industrial y espíritu de competición.
Fundó primero Montesa y después Bultaco, dos de las marcas legendarias que han reinado durante años en el motociclismo de nuestro país, y dio pedigrí al mundo de la moto de campo con modelos que aún circulan dignamente por nuestras ciudades y que los coleccionistas exhiben con orgullo.
Los honores moteros del patriarca se adornan con su capacidad humana para transmitir su legado emocional y su pasión a sus diez hijos, reunidos durante tantas jornadas de moto y familia en su finca de Vilanova i la Geltrú, sin duda, uno de los lugares de referencia para entender el fenómeno motero en España.
Diez hijos
Entre sus vástagos (cinco hombres y cinco mujeres), destaca el palmarés del mayor, Ignacio Bultó , Yato (cuatro campeonatos de España de trial, una medalla de oro en los ISDE –Copa del Mundo de Enduro–, varios subcampeonatos de España de Motocross y un Campeonato de España de Resistencia). Del resto, el más conocido y mediático es el malogrado Álvaro Bultó, un aventurero sin límites al que su ADN de deportista extremo le ha tendido una trampa mortal . Junto a su hermano, participó en varias ediciones del Campeonato de España de GT al volante de un Ferrari 360 Modena, entre otras muchas actividades de aventura. Ha sido curiosamente una práctica no vinculada al motor la que le ha arrebatado la vida. [ En imágenes, Bultó, toda una vida al límite ]Las marcas Bultaco y Montesa
El resto de los varones también han tenido vinculación con la moto, aunque menor. Las descendientes del fundador de Bultaco no compitieron, pero la genética perdura en sus adentros. De los nietos, el nombre más conocido es el de Sete Gibernau Bultó, piloto de MotoGP. Miki Arpa (Campeón del Mundo de Enduro por equipos en 1998 y 1999), Lucas y Daniel Oliver (participantes en diferentes competiciones y profesores de cursos de conducción) son algunos de los otros nietos con “genes Bultó”.
250 modelos distintos y míticos
En sus 50 años de trayectoria, la marca Bultaco fabricó casi 250 modelos distintas de todas las especialidades y llegó a producir unas 330.000 unidades, exportando a numerosos países como Francia, Italia Estados Unidos, Canadá, Austria, Holanda, Finlandia... Actualmente, la marca del "dedo rampante", que ha quedado inmortalizada con modelos míticos como la "Streaker", "Metralla", "Mercurio", "Lobito" o "Alpina" , y a la que las motos japonesas le arrebataron el liderazgo en los setenta, se mantiene como una leyenda. Los incondicionales de la marca del "pulgar en alto" siguen alimentado la memoria de un sello vinculado a una saga de la alta burguesía catalana que ha sabido hacer leyenda sobre dos ruedas.
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