EE. UU. prohíbe a sus funcionarios en China tener relaciones sexuales o sentimentales con ciudadanos locales

El gobierno de Estados Unidos ha prohibido a sus trabajadores gubernamentales en China mantener relaciones sexuales o románticas con ciudadanos chinos, según ha informado Associated Press.

La medida, que entró en vigor en enero, afecta tanto a los funcionarios como a sus familiares y contratistas con acreditaciones de seguridad. Fueron cuatro trabajadores quien de forma anónima explicaron a AP el contenido de esta nueva norma, implementada por el embajador norteamericano en el gigante asiático, Nicholas Burns, antes de abandonar el cargo.

El motivo de esta norma sería garantizar la seguridad y evitar casos de espionaje en el actual contexto geopolítico con las relaciones tensionadas entre EE.UU. y China, más aún desde el anuncio de aranceles por parte de Donald Trump, quien asignó al país asiático unos impuestos del 34%.

Aunque algunas agencias ya tenían políticas de «no confraternalización», medidas tan estrictas como esta no se conocían desde el final de la Guerra Fría. La consecuencia de su incumplimiento es abandonar China de forma inmediata.

Es habitual que trabajadores que pasan periodos de tiempo trabajando en otros países acaben manteniendo relaciones con sus ciudadanos e incluso lleguen a formar una familia.

Ya el verano pasado, los funcionarios tenían orden de no mantener relaciones con el personal de seguridad de las embajadas y consulados, pero desde principios de año la orden se extendió a los civiles chinos. La orden no aplica a los trabajadores estadounidenses que mantuvieran previamente una relación con algún ciudadano chino. Tampoco se aplica a los funcionarios destinados a otros destinos fuera del gigante asiático.