Ola de ataques a cárceles francesas en respuesta a la ofensiva del Gobierno contra el narcotráfico
Las autoridades lidian con lo que han denominado el «tsunami blanco» de cocaína que asuela el país
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La Fiscalía Nacional Antiterrorista (FNAT) sospecha que las redes de narcotraficantes han lanzado una «guerra» a tiros e incendios contra las prisiones donde están encarcelados numerosos individuos condenados por delitos de tráfico de drogas en banda criminal organizada.
Durante las últimas dos semanas, las prisiones de Tolón, Aix-en-Provence, Aix-Luynes, Nanterre, Réau, entre otras ciudades de provincias, han sido víctimas de ataques y actos de vandalismo muy semejantes: ataques a tiros contra las torres de control, incendio de automóviles, tiroteos contra instalaciones policiales, ataques y pintadas de vehículos policiales…
«Todo eso parece bien coordinado y se asemeja a una estrategia de intimidación contra el gobierno y los agentes de la seguridad del Estado», ha comentado una fuente del FNAT a varios medios franceses.
Gérald Darmanin, ministro de Justicia, puso en marcha hace semanas una nueva política de detención penitenciaria de narcotraficantes, creando «bloques» especiales de detención más dura. Está previsto crear nuevas prisiones especializadas con el fin de combatir más eficazmente una 'plaga' creciente, feroz y ensangrentada. Marsella es la capital más insegura del Mediterráneo occidental desde hace varios años, y puerta de entrada, en Francia y Europa, de drogas y armas de muy diversa procedencia.
Darmanin visitó la tarde del martes la prisión de Tolón para apoyar con su presencia y declaraciones de firmeza la nueva política más dura contra la narcodelincuencia.

El sindicato FO-Justicia, el mejor implantado en su sector, comenta la crisis de este modo: «Esta ola de atentados y actor criminales son un ataque frontal contra nuestras instituciones, contra la República, contra los agentes del servicio público que trabajan en nuestras prisiones».
El ministro del Interior, Bruno Retailleau, ha declarado por su parte haber dado instrucciones a los prefectos locales, junto con la policía y la gendarmería, para que reforzaran de inmediato la protección del personal y las prisiones. «La respuesta del Estado debe ser implacable», escribió en X. «Quienes atacan las prisiones y a los funcionarios de prisiones deben ser encerrados en estas cárceles y vigilados por estos agentes».
En febrero, al anunciar incautaciones récord de cocaína de 47 toneladas en los primeros 11 meses de 2024, frente a las 23 toneladas de todo 2023, Retailleau afirmó que Francia había sido golpeada por un «tsunami blanco» que había reescrito las reglas del panorama criminal.
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