Los liberados de Bahréin

En la madrugada del miércoles, al menos 70 de los más de 500 presos políticos que cumplen condena en las cárceles de Bahréin fueron liberados por el Gobierno, en una medida encaminada a silenciar los posos mediáticos de la multitudinaria manifestación (300.000 personas, según la oposición) que unas horas antes había recorrido las calles de Manama.

Dos celebraciones festivas, que suponen la mayor protesta desde el levantamiento popular iniciado el pasado 14 de febrero contra el monarca Hamad bin Isa al Jalifa, y que ayer tenían su nexo común en la plaza de la Perla .

Como denuncia a ABC uno de los liberados, Yassed Qasim -de tan solo 16 años-, en la cárcel, la mayoría de los presos políticos son «torturados y vejados sexualmente». Para Qasim, su liberación es una maniobra del Gobierno con el objetivo de ganarse la simpatía dentro de la población .

Y no va mal desencaminado. Entre los eximidos de condena se encuentran, precisamente, 23 de los 25 presos acusados de «delitos de terrorismo», cuya liberación exigía el principal partido opositor chií, Al Wefaq, antes de iniciar con el Gobierno cualquier tipo de negociación.

Pero las denuncias de Qasim, quien llevaba cinco meses en prisión tras quemar un neumático a modo modo de protesta, no son únicas. De bajo perfil, la mayor parte de los liberados la pasada madrugada son menores de edad con pequeños delitos en su expediente.

Éste es el caso de Ahmed Suhail (16), quien fue condenado «por repartir panfletos en contra de la monarquía» o Hassan al Bari (17) «sentenciado a cinco años por asistir a un mitin político». De igual modo se posiciona Abdulla Jaffar (15), quien recuerda que, aunque «es un primer buen paso», todavía «queda mucho camino por recorrer».

Eso sí, anoche, en la plaza de la Perla, nadie les podía robar la sonrisa .