DeTapeo
Roostiq Bar, la cocina de producto al servicio de la barra
Apertura
El tercer local de los Roostiq de Madrid y Marbella da mayor peso a la carta líquida y a su nutrida bodega
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El restaurante Roostiq, con sedes en Madrid y en Marbella y centrado en el producto de proximidad, lanza su versión más ligera y dedicada especialmente al mundo líquido con la apertura de Roostiq Bar. El nuevo local, ubicado cerca del primero, en el barrio ... de Justicia de la capital, mantiene algunos platos emblemáticos de la marca en su carta, pero potencia otros pensados para picar y compartir y sobre todo su gran bodega y su coctelería de autor.
Gran parte de los alimentos que se usan en Roostiq provienen de las dos fincas ecológicas, con huerta y ganadería, que tiene en Ávila su fundador, Zoilo Álvarez. Desde los tomates y las verduras hasta sus carnes, huevos o el pollo. Son la clave de la trayectoria de su cocina.
En este tercer local se mantienen. Pero, además, Álvarez quería tener «lo que para nosotros es un bar», esto es, un espacio donde se comiera igual de bien -tanto en las mesas como en la barra-, pero que diera prioridad a las bebidas. Tanto es así que la bodega del flamante espacio tiene 700 referencias, con una selección de etiquetas especiales y un buen despliegue de champán y borgoña por la afición hacia este tipo de vinos que tiene el empresario (desde 5,50 por copa). En tanto, en la parte de cócteles, se sirven todos los clásicos y versiones propias, con gran variedad -unas 300 botellas- de whiskies, mezcales y tequilas (entre 13 y 16).



En cuanto a la comida en Roostiq Bar, con solo un par de semanas de andadura y un ambiente informal pero elegante por las noches gracias a su decoración con cristales, formas redondeadas, tonos oscuros y finos neones, destacan los famosos torreznos ahumados de la casa (se hacen al horno, y se sirven cortados en láminas, con ese toque umami y la corteza crujiente; 17 euros) junto con los embutidos de bellota elaboración propia (30 una tabla variadas que lleva además torreznos).
También triunfan ya las acelgas de Roostiq (18), la sorprendente hamburguesa de pollo (24), las croquetas mixtas de jamón y pollo (14), la ensaladilla de gamba blanca de Huelva (14, con caviar 45), junto con toda su selección de mariscos al fuego (por ejemplo, los berberechos del Cantábrico, 35), para los cuales su creador distingue en cada caso la técnica necesaria para cada uno, y pueden ir a la brasa, llama o plancha.
Roostiq Bar

- Qué pedir: torreznos, croquetas, verduras a la brasa, hamburguesa, mariscos.
- Perfecto para: cualquier ocasión.
- Precio copa de vino: 5,50 euros.
- Precio torreznos: 17 euros.
- Dirección: C/del Barquillo, 40. Abre todos los días. De 13.15 a medianoche la cocina, hasta la 1.30 la barra. madrid.roostiq.com
Con un ticket medio de unos 50 euros, aunque según la bebida puede cambiar mucho, hay además carnes, pollo y pescados en este apartado al fuego, que se pueden acompañar con patatas fritas, puré trufada, ensalada de lechuga y cebolleta, cebolla gratinada con trufa, pimientos rojos fritos al caldero o verduritas 'baby'.
En la parte dulce, a cargo de Raquel Álvarez, se incorpora también aquí su clásica tarta de queso acompañada con nata montada y licor amaretto (10) y nuevas creaciones como la 'Milhoja de los lunes' (12) con merengue y crema pastelera o la tarta de chocolate con crujiente de avellana, crema inglesa y nata montada (10).
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