El lento viaje del AVE a Almería: más de veinte años para 185 kilómetros interminables

Gobiernos de diferentes siglas han sido testigos y corresponsables de esta dilación a causa de atrasos en la redacción de proyectos de los tramos, licitaciones, modificados de las empresas e incluso la aparición de especies protegidas en el trayecto. Este malestar general en la sociedad, colectivos y empresarios ha dado lugar a la creación de dos plataformas muy significativas que siguen vigilantes el estado de las obras.

La primera de las iniciativas que surgieron para poner sobre la mesa las vergüenzas del lento viaje de la construcción de la infraestructura ferroviaria fue la Mesa del Tren. Posteriormente, desde el mundo empresarial y promovida por la Cámara de Comercio nace 'Almería Objetivo-AVE'.

No fue hasta 2007 cuando Adif licitó la construcción del primer tramo en la provincia almeriense, un territorio por el que transcurren 108 kilómetros del total de la línea con Murcia. Hasta tres veces, el Gobierno retrasó la fecha para agilizar los trabajos, primero 2005, después 2007 y el exministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, trasladó el plazo a 2010.

La crisis económica paralizó hace diez años importantes infraestructuras de obra pública, entre ellas la Alta Velocidad en Almería. Desde 2012 hasta 2019 las actuaciones estuvieron suspendidas, se anularon contratos y no se avanzó en la línea ferroviaria con la región murciana. A mediados de 2014 dos túneles de hormigón fueron tapiados, argumentaron motivos de seguridad y de mantenimiento, fueron ejemplo gráfico del atasco en la financiación.

«Tuvimos casi ocho años de sequía, no se puso ni un clavo. Son incertidumbres que se cruzan por el camino, si hay un cambio de Gobierno confiamos en que se mantenga la hoja de ruta actual, Feijóo no es Rajoy», afirma el portavoz de la Mesa del Tren, José Carlos Tejada.

Una vez retomados los trabajos surgieron nuevos problemas. Adif tuvo que expropiar terrenos para crear una reserva natural de tortuga mora (Testudo graeca) cuyas poblaciones se vieron afectadas por la construcción del tramo Pulpí-Cuevas del Almanzora. Más de un año estuvieron paradas las obras hasta que los técnicos de Medio Ambiente procedieron a la retirada y salvaguarda de esta especie protegida.

Para el presidente de la Cámara de Comercio, Jerónimo Parra, la situación que se ha generado «es fruto de un cúmulo de incumplimientos y promesas, dificultades en los proyectos y tensiones por los costes». Estas circunstancias «han ido arrinconando cada vez más a la provincia, relegándola a ser una isla».

Hasta el momento se han invertido más de 3.300 millones de euros en esta línea. En la provincia de Almería todos los tramos están en construcción, salvo la segunda fase de integración del AVE en la capital. «Adif no va a adjudicar la obra hasta que no tenga plena garantía del compromiso de financiación, por el momento la Junta de Andalucía no lo ha hecho», recuerda Tejada. Desde la administración andaluza argumentan que están terminando de perfilar detalles de carácter jurídico al tratarse de fondos europeos.

El tiempo se acaba para cumplir con la fecha 2026, el término que aventuró en 2021 el exministro socialista José Luis Ábalos y que refrendó su homóloga actual Raquel Sánchez. «Hemos notado en los últimos meses un impulso importante en las obras, antes se veían a cuatro operarios, pero ahora hay tuneladoras, maquinaria y movimiento de tierras», revelan desde la Mesa del Tren.

«Confiamos en el compromiso que hay actualmente. No sería entendible justificación alguna para un nuevo retraso. Seguiremos defendiendo que el AVE esté en Almería dentro de dos años. La planificación proyectada debe seguir su curso, independientemente de lo que suceda en las elecciones generales», indica Parra.

Para Almería es fundamental que se cumplan los plazos, ya se entra en periodo de descuento, en apenas dos años y medio se cumple el periodo prometido por el Gobierno. La infraestructura tiene una complejidad técnica elevada con obras singulares como el viaducto de Cadímar en Los Gallardos con una longitud de casi 1.965 metros; y los túneles de Sorbas de 7.538 metros, que serán los más largos de toda Andalucía.

«Lo cierto es que los trabajos son bastante visibles, pero no hay tiempo que perder. La continuidad y la intensidad de las obras deben ser cada vez mayores. Hemos superado uno de los hitos pendientes, el anuncio del soterramiento en Lorca, las obras podrían iniciarse en 2024 y cumplirse los plazos», concluye el presidente cameral y portavoz de la plataforma Objetivo AVE 2026.

La incertidumbre ante posibles retrasos que frenen la llegada del AVE a la capital almeriense está presente. Como ejemplo, obras previstas para diez meses como la de El Puche multiplicaron por tres su duración, sumando más demoras para una línea que constará de dos vías para tráfico mixto que está diseñada para velocidades máximas de 300 kilómetros por hora.