Es fútbol y es femenino
Por qué Estados Unidos ya no es para tanto
«A los técnicos americanos les llamó la atención nuestra capacidad de asociación y de crear juego. Sus futbolistas se limitaban a chocar y correr»
Chile sigue a España y también grita «se acabó»

El Mundial confirmó que Estados Unidos ya no es tan superior y arrolladora en el fútbol femenino. Cayó ante Suecia en octavos. Ya lo había insinuado en los partidos de preparación y amistosos previos. España las derrotó en octubre y sin las amotinadas. ... Ya no son ese rodillo físico que destrozaba a las rivales. El cambio sustancial es el gran trabajo realizado por las otras selecciones en ese campo.
En 2015 dirigí un equipo sub 16 de la academia de fútbol femenino AR10 en un torneo en Orlando (EEUU). Lo ganamos. A los técnicos y entrenadores americanos les llamó poderosamente la atención nuestra capacidad de asociación y de crear juego en el equipo. Las jugadoras americanas se limitaban a chocar y correr. Los entrenadores americanos nos preguntaban cómo éramos capaces de jugar así.
No resulta extraño que el Gotham FC, dirigido por el español Juan Carlos Amorós, se haya proclamado este fin de semana campeón de la liga estadounidense. Allí juegan Maitane López y Esther González, dos españolas de una gran capacidad física a la que suman talento y calidad, cualidades de las que España presume tanto en los banquillos como sobre el césped. El cóctel perfecto.
Donde todavía estamos muy lejos con respecto a los americanos es en los despachos. Sus datos como industria nos superan por muchos dígitos: asistencia a los campos, audiencias, venta de derechos comerciales y de marketing… Se acaba de hacer público, por ejemplo, que han vendido los derechos de televisión de su LIga hasta 2027 por diez veces más que en el anterior contrato.
También nos aventajan en la facilidad que tienen sus jugadoras para compatibilizar los estudios con el fútbol de alto nivel, tanto en el high school como en la etapa universitaria, antes de dar el salto a la profesionalidad. Eso aún es inimaginable en España. Por eso, muchas futbolistas, cada vez de más talento y calidad, dan el salto en su etapa universitaria a las ligas americanas. Los casos de Ana Salas y Celia Agudo, ambas provenientes del Real Madrid, o el de la manchega Inés Martin, de la cantera del Levante, lo corroboran.
El título Mundial debe servir a España de oportunidad para crecer en esos aspectos y aprovechar la enorme calidad de su fútbol femenino.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete