Furioso por ser expulsado, un futbolista saca un cuchillo y ataca al público

Nuevo episodio de violencia en el fútbol, en este caso en un encuentro de categoría regional disputado este domingo en Francia. Así, el partido entre el Olympique Briançon Serre-Chevalier y el equipo reserva del EP Manosque, jugado en el Distrito 2 de los Alpes, tuvo que ser suspendido por un grave incidente de orden público.

El resultado era muy claro a favor de los locales (4-1), pero ello no evitó que la tensión habida sobre el césped desembocara en una bronca con insultos y gestos agresivos. El árbitro expulsó a dos jugadores, uno por equipo, y fue a partir de ahí donde se desencadenaron unos acontecimientos que estuvieron a punto de acabar en tragedia.

Según informa 'Le Dauphiné Libéré (DL)', el futbolista del conjunto visitante, visiblemente airado, sacó un cuchillo y se dirigió hacia el lugar que ocupaba el público asistente. Saltó la valla que separa el campo de la grada y se fue a por los espectadores.

El agresor se encaró con los aficionados del Briançon y con los jugadores de L'Argentière-la-Bessée, equipo que debía jugar a continuación su partido contra el Oraison.

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Afortunadamente la policía llegó muy rápido. Detuvo al futbolista y restableció la calma. La gendarmería de L'Argentière-la-Bessée está llevando a cabo la pertinente investigación. Según 'DL', el principal implicado niega cualquier posesión de arma blanca a pesar del creciente número de testimonios que lo acusan.

Patrick Bel Abbès, presidente del distrito de los Alpes, manifestó: «Solo puedo condenar los hechos y lamentar estos incidentes, el fútbol en nuestro departamento solo debe ser un placer».

En la misma línea , los alcaldes de Manosque y Briançon exigen sanciones ejemplares: «Un campo de fútbol debería ser un espacio para la superación personal y los valores del deporte, no un lugar para la violencia ciega, como los ajustes de cuentas en los distritos del norte de Marsella. Esto es inaceptable y repugnante, y pedimos a la Federación Francesa de Fútbol que tome medidas y que le ponga fin lo antes posible».

«El Manosque debe resolver rápidamente sus problemas de comportamiento, que perjudican la imagen de la ciudad y del fútbol en general. Esta brutalidad es intolerable y se esperan medidas enérgicas», añadió el edil de Manosque, Camille Galtier.