Así funciona la cámara hiperbárica que acelera la recuperación de los jugadores de la selección

«La cámara hiperbárica es un aparato en el que se necesitan alcanzar al menos dos atmósferas de presión para que el tratamiento sea clínicamente efectivo. Una vez hecho, lo que hace la cámara es disolver el oxígeno en el plasma sanguíneo y aumentar en 23 veces la cantidad oxígeno que absorben nuestros pulmones. Las moléculas de oxígeno se hacen la mitad de pequeñas. por lo que el intercambio de gases en los alveolos pulmonares es mucho más rápido», explica a ABC Sergio Calvo Calvo , técnico especializado en esta técnica de la Clínica Ulcemed de Madrid.

«La cámara tiene tres efectos fundamentales: uno inflamatorio , otro propio de la oxigenoterapia , y un último relacionado con la revascularización , es decir, la creación de nuevos vasos sanguíneos», añade Calvo. Todos ellos ayudan a los deportistas a lograr una recuperación más eficiente, dado que se trata de un acelerador metabólico. «La sesión estándar dura 80 minutos porque se requieren 60 minutos de tratamiento efectivo». Gracias a la ventilación constante, el aumento de la presión hasta aproximadamente dos atmósferas y la inhalación de 100% oxígeno medicinal, el deportista puede acelerar hasta en un 50% su recuperación. «Se trata de una técnica que siempre funciona dentro de unos rangos seguros, tanto de tiempo como de presión, por lo que no hay efectos negativos secundarios conocidos», cuentan desde Ulcemed.

Una manera de recuperar la forma tras la realización de un esfuerzo que estos días experimentan los jugadores de la selección española después de una temporada muy larga cargada de partidos. Una tecnología que, según desvela Calvo, equivaldría a hacer submarinismo a unos diez metros de profundidad, con el añadido de respirar oxígeno medicinal al 99,9%. «Esto conllevaría una serie de riesgos y es por este motivo por el que se crearon las cámaras hiperbáricas, también conocidas como cámaras de buceo en seco », dice.

Las cámaras hiperbáricas son cada vez más frecuentes en el deporte de élite, siendo multitud de futbolistas los que las utilizan para combatir de la mejor manera posible la enorme exigencia de la competición: «Nosotros tratamos a futbolistas de élite que, en muchos casos, vienen con su propio protocolo hecho por su médico. Tienen una pauta de tiempos y descansos que es la que les funciona mejor», explica Calvo, que señala además otros tipos de dolencias para las que también es eficaz esta práctica: «Es una técnica muy útil para deportistas, pero también para otras patologías como aquellas relacionadas con daños neurológicos, lesiones diabéticas o intoxicaciones».