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Sr. Chinarro: «La gente se ha subnormalizado, da asco ver cómo vota a favor de su propio exterminio»

El proyecto de Antonio Luque se sumerge en nuestras miserias pixeladas con su nuevo disco, 'Reality Show'

Antonio Luque, Sr. Chinarro abc

Nacho Serrano

Lo demuestra una, y otra, y otra vez. Antonio Luque es uno de los compositores con la mirada más despierta del panorama nacional, una persona que hace canciones en una industria de influencers metidos a músicos. Los discos de Sr. Chinarro entretienen, sí, pero también enriquecen si uno tiene ganas de prestarles atención con el cuerpo preparado para recibir algún dardo. Lo ha vuelto a hacer en 'Reality Show', un nuevo álbum que se sumerge en nuestras miserias pixeladas para hablar de las cosas que nos hacen humanos, o no.

Siempre he pensado que para disfrutar -no sé si diría 'entender'- plenamente de sus discos hay que tener ciertas cicatrices vitales. Pero musicalmente, este tiene una frescura que puede disfrutar cualquiera, gente muy joven o gente que vive en esa ignorancia, indiferencia o cinismo que hace que todo sea menos doloroso.

Los temas que trata están escritos por un tío de 52 años. Pero los jóvenes ahora empiezan muy pronto con todo. Una vez me pasó que di un concierto para niños con música infantil de los ochenta, las canciones de 'Dartacán', 'Banner y Flappy' y cosas así, y durante toda esa parte, los críos no hicieron ni caso. Luego cuando me puse a cantar temas de Sr. Chinarro se lo pasaron mucho mejor, supongo que es porque se lo ponían en el coche sus padres, que fueron quienes les llevaron...

El título 'Reality Show' no es que sea muy original, pero por alguna razón, impacta.

Me parece muy curioso que nunca se haya publicado un disco con ese título. Evidentemente lo miré antes de ponérselo, y no encontré nada.

Al principio el Gran Hermano de las redes nos aborrecía a casi todos, pero ya casi nadie prescinde de su cuenta en Twitter o Instagram, es más, nuestros perfiles son nuestros micro-realities ¿no?

Claro, de eso va el disco, eso es lo que quiere decir. Veníamos de estar todo el día enganchados a la tele y ahora estamos enganchados a retransmitir nuestras vidas en tiempo real. La gente sale hasta follando. Y si se descuidan, un día hasta los podremos ver discutiendo a gritos. Pero bueno, todo pasa. Yo creo que la gente se va a empezar a cansar de las redes sociales.

¿Usted cree?

Nos aburrimos de todo. Al final habrá una guerra y nos mataremos entre nosotros, porque eso es lo que más entretiene.

Se abrió una cuenta en Tinder como herramienta de investigación para el disco, ¿qué es lo más absurdo que se encontró?

Yo creo que al final es más para hacer amigos, no creo que salgan muchas parejas de ahí. Tinder sólo sirve para tener el subidón del 'match'. Luego, las conversaciones no suelen llegar a ninguna parte y por eso no hay la química que hace falta para echarse pareja.

'La audiencia decide' es de las canciones más cáusticas del disco. ¿Está más pendiente de la actualidad de lo que le gustaría?

La mayoría de las letras las escribí en noviembre 2020, cuando todavía estábamos muy encerrados. Fueron los meses en los que más tele y ordenador consumimos de nuestra vida, y por eso es normal que se note en las letras. Pero sí, me da asco ver las noticias, ver cómo la gente vota para que haya más sanidad privada y menos pública, ver cómo la gente vota en contra de sus propios intereses, ¡ver cómo la gente vota para su propio exterminio! Me parece tristísimo. Y luego, las tonterías de la prensa del corazón siempre me han parecido intolerables. Y fútbol, como el del bar de abajo es subnormal, pues lo único que hago es escuchar Libre Directo para ver qué tonterías hace Monchi.

Hay quien defiende la prensa rosa porque 'entretiene a gente que está muy sola' y demás...

A mí, que la gente consuma basura me parece una barbaridad. Lo peor es que ahora todo el mundo se expresa como si estuviera enfarlopada. Incluso personas que no han tomado cocaína en su vida. Como llevan tantos años escuchando a estos personajes que salen en esos programas, ahora piensan que esa es la manera normal de hablar. A mí, hablar muy alto cuando se conversa, me resulta muy molesto. En general la gente se ha subnormalizado y nadie la va a desubnormalizar, porque no hay ningún desubnormalizador que los desubnormalice. Lo siento por ellos. Yo ya sólo pienso en adónde iré, si habrá algún refugio en alguna parte del mundo donde pueda llevarme a mi niña. Cuando la Guerra Civil hubo quien se fue a México, y yo me iría allí gustoso porque su comida me gusta bastante más que las paellas y los potajes llenos de morcilla.

Nunca se ha cortado diciendo las cosas que no le gustan, por impopular que sea. Por ejemplo, no traga el reguetón, pero tampoco el flamenco.

Ni la cumbia ni el electrolatino, puedes subrayarlo.

Hace poco parodió una letra de reguetón: 'Es-toy en el par-que / con mis co-le-gas. / Me fu-mo un po-rro. / Me fo-llo a mi pu-ta'. Hay quien dice que las letras del rock'n'roll también eran más o menos así... pero había más metáfora ¿no?

Estaban mucho más elaboradas, y no todas hablaban de lo mismo. No puedes comparar 'Sexo, drogas y rock'n'roll' de Ian Dury con el trap. La melodía, la armonía, la interpretación de esa canción se come con patatas todo lo que hayan hecho con el ordenador los chavales del trap.

«La gente se tiene que dar cuenta de que se puede vivir comiendo pan, bebiendo agua y teniendo techo»

'Sexo, mar y sol' describe una situación de maltrato laboral. ¿Vamos a peor aunque haya ciertos avances como las subidas del salario mínimo?

El hijoputismo no para de crecer. Según se va consiguiendo más y más subnormalización, el hijoputismo de las élites medra más fácilmente. Cuanto más víctima quiere ser la víctima, más verdugo quiere ser el verdugo.

¿En algún momento ha sido más idealista que desencantado crónico?

Yo sólo me he metido en política cuando me eligieron delegado de clase, y allí tuve mi primera experiencia con la corrupción. Estábamos en COU, y cuando tocó organizar el viaje de fin de curso recaudando todo el dinero y demás, hubo noches en las que hacíamos lo que llamábamos 'noches de pizza', que era comernos unas pizzas con parte de la pasta. La primera vez yo dije 'oye esto está mal, no tenemos derecho a comernos estas pizzas', y alguien respondió 'pero a que están buenas?'. Si compañeros de clase hacíamos eso, ¿qué no harán los políticos manejando esos presupuestos multimillonarios?

Cuando en redes sociales hay debates sobre la nueva crisis económica que estamos viviendo, he visto que le interesan temas como el decrecimiento.

Por supuesto, muchísimo.

¿Cree que es viable un decrecimiento no doloroso? Porque el sistema está diseñado para crecer, o de lo contrario morir. Al menor signo de crecimiento bajo, las empresas cierran, la gente se queda sin trabajo...

¡Pues que cierren! Es lo mejor que puede pasar. La gente se tiene que dar cuenta de que se puede vivir comiendo pan, bebiendo agua y teniendo techo, por decirlo de una manera gráfica. Yo vivo prácticamente así. Se puede vivir con muy pocas cosas. Sólo con que la gente renunciara al coche tendría cada mes quinientos euros más en su bolsillo. Pero no, tienen que estar todo el puñetero día echando humo. ¿Por qué me tengo que tragar yo esa mierda? Ahora los transportes públicos se han abaratado muchísimo, que los usen.

Los sintetizadores tienen bastante importancia en la creación de atmósferas en este disco. ¿Cómo lo va a presentar en directo? ¿Se los va a llevar? ¿Va a dar un salto a nivel visual y logístico?

Mis conciertos son conciertos. Quien quiera ver pantallas que se vaya al cine, que además ahora no va nadie. Un concierto es ir a ver a un grupo tocar. Esto de tocar en sitios tan enormes que sólo te pueden ver por pantallas... ojo cuidao porque llegará un momento en el que las pantallas sustituirán a los artistas, y perderán una de las pocas fuentes de ingresos que les quedaban. Yo no pongo ni el nombre de mi grupo detrás. Dicho esto, no voy a llevar ni los sintetizadores.

¿Pagaría por seguir en Twitter si el señor Musk cambiara las reglas?

¡Jajaja! Yo pagaría por que me cerraran las redes sociales. No sé, un psicólogo o algo que me fuera diciendo 'mira, esto mejor ciérralo porque tal y porque cual'. ¿No hacen eso, cobrar por decirte lo que tienes que hacer? Yo lo pagaría. Igual que la promo del disco debería hacerla el sello, que para eso cobra el ochenta y ocho por ciento de los royalties.

Un Chinarro es el agujero que deja una china incandescente.

Pero yo me lo puse por los payasos de la tele. El actor que hacía de payaso serio se llama así. Él era el que intentaba poner orden, pero se daba cuenta de que era imposible. Y mira, es justo lo que estábamos diciendo antes: es imposible desubnormalizar. Yo seré un payaso, pero nunca seré un subnormal.

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