Paloma Picasso, sobre la revisión del pintor a raíz del #MeToo: «Como hija creo que era feminista»
«Si voy a un museo, voy a ver las obras de Pablo Picasso, no las de mi papá», comenta la hija del artista y Françoise Gilot
La última revolución del arte: el cubismo nació con El Greco

Hija de Pablo Picasso y Françoise Gilot , Paloma Picasso (1949) acompañaba ayer a Carmen Giménez en los últimos detalles del montaje de la muestra que confronta al pintor malagueño con El Greco . En una de las salas atendió, muy afable, ... a la prensa española durante unos minutos. ¿Qué opina de esta teoría de que el cubismo nació con El Greco? «Carmen está mostrando a todos que tiene razón». ¿Estaría de acuerdo su padre con que fue El Greco y no él quien inventó el cubismo? «Nooooo. Hay una simplificación que se vuelve casi abstracta, pero todavía no es cubismo lo de El Greco, no lo podemos llamar cubismo».
En cuanto al aluvión de exposiciones de Picasso de cara al 50 aniversario de su muerte , comenta que «es tan rica su obra que siempre se puede mirar de un lado, del otro...» Le preguntan si alguna vez ha negado algún préstamo: «Una vez me pidieron un cuadro para el Tour de Francia. Era 'El rapto de las Sabinas', donde hay una mujer que se ha caído de una bicicleta. Dije que no». ¿Qué opina de que en Francia algunos dicen que Picasso es el mejor pintor francés nacido en España ? «Para él no era eso lo importante de su vida, que fuera español o francés. Lo importante es su obra y una obra no pertenece a un país».
¿No cree que en cierta medida se está manoseando demasiado la figura de Picasso? ¿No habría que dejarlo descansar en paz? « Hay tanta sed de Picasso... Hay muchos temas posibles. Él ha tenido una producción enorme. Se puede hablar de los cuadros, de las cerámicas... Hay tantos, tantos elementos que él ha usado...» ¿Está involucrada la familia en esta exposición? «A mí no me tocó», responde Paloma Picasso. Añade Carmen Giménez que, pese a que son muy amigas, ella no le ha preguntado qué tiene en su colección: «Es algo muy personal». ¿Tiene pensado exponer algún día su colección? «No, porque no soy como una persona que ha formado una colección, a mí me tocó mi colección . No es algo que yo haya hecho».
¿Qué le parece la exposición? «Es fantástica. Hay cosas que yo había visto en fotos. Todo lo que estaba en casa de mi padre lo vi. Pero eso fue hace... no sé cuántos años ya. Cincuenta, quizás. Hay un cuadro muy, muy lindo, que es de mi hermano. Cuando lo he visto dije: 'Ahhhh', no me acordaba de él. Es fantástico. A veces golpea más un cuadro porque está al lado de otra cosa. Cuando puedo, si hay exposiciones muy importantes, me gusta verlas en dos museos distintos. Uno descubre cosas que no ha visto en otro. Si miro un Picasso lo hago como si miro un Matisse... ¿Por qué? «Por respeto a mi padre, porque, además de ser mi padre, que es más importante, si voy a un museo voy a ver las obras de Pablo Picasso, no las obras de mi papá. Lo admiro por lo que es. Puedo recordar si vi una obra en la casa en un momento, o que es un retrato mío, pero mi primera mirada es como la de ustedes». ¿Es una crítica dura con la obra de su padre o es benevolente? «Lo más respetuosa...».
Sobre la revisión que se está haciendo de Picasso a raíz del #MeToo , responde: « Me parece absurdo, absurdo ». Bernard Ruiz-Picasso dijo en una entrevista que Picasso era feminista. ¿Lo cree también? «Sí, como hija, pienso lo mismo, absolutamente. Les gusta hacer ruido ».
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