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La NASA borra el plan de llevar a la Luna a la primera mujer y a la primera persona negra por mandato de Trump

Las alusiones sobre la presencia femenina y afroamericana en la misión Artemis 3, cuyo objetivo es pisar la Luna en 2027, han sido eliminadas de la web de la agencia espacial

Artemis II hará historia: la primera mujer y el primer afroamericano volarán a la Luna el año que viene 

La tripulación asignada para la misión Artemis 2, que incluye a Christina Koch (derecha) y a Victor Glover (a la izquierda de Koch) nasa
Patricia Biosca

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La NASA ha abandonado, al menos de cara al público, su compromiso de llevar a la primera mujer y a la primera persona negra sobre la Luna. La decisión, aunque en la línea con la directiva impuesta por Donald Trump de eliminar las prácticas de diversidad, equidad e inclusión en las agencias federales, choca contra el hecho de que fue su propia administración en 2019 quien tomó la decisión de incluir a este perfil de astronautas en la primera misión del Programa Artemis (el nuevo esfuerzo de la agencia para volver a la Luna) que pisara nuestro satélite.

La página web dedicada a este proyecto incluía anteriormente la siguiente frase: «La NASA llevará a la primera mujer, la primera persona de color y el primer astronauta internacional a la Luna utilizando tecnologías innovadoras para explorar más de la superficie lunar que nunca antes». Sin embargo, la versión de la página activa en el sitio web ahora aparece con estas palabras eliminadas.

«De acuerdo con la orden ejecutiva del presidente, actualizamos nuestra redacción sobre los planes para enviar tripulación a la superficie lunar como parte de la campaña Artemis de la NASA. Esperamos conocer más sobre los planes de la administración Trump para nuestra agencia y la expansión de la exploración lunar y marciana para el beneficio de todos», señaló por correo electrónico a The Guardian el portavoz de la NASA, Allard Beutel.

El favorecido Musk

Tras el párrafo borrado, se puede leer: «Estamos explorando la Luna para realizar descubrimientos científicos, avances tecnológicos y aprender a vivir y trabajar en otro mundo mientras nos preparamos para las misiones tripuladas a Marte». Es decir, aunque se ha eliminado la alusión a la primera mujer y la primera persona de color pisando nuestro satélite, la Luna sigue siendo un objetivo antes de ir al Planeta Rojo. Punto que también ha sido cuestionado en los últimos tiempos por el ahora mano derecha de Donald Trump, Elon Musk, dueño también de SpaceX, la principal empresa contratista de la NASA.

De hecho, la nueva posición política de Musk está siendo muy cuestionada por posible conflicto de intereses, ya que contratos de valor de miles de millones de dólares, como algunas redes gubernamentales críticas o misiones espaciales, se le están otorgando a SpaceX.

Los otros damnificados

La acción de la NASA, que fue denunciada públicamente por primera vez por el Orlado Sentinel, está en consonancia con el cumplimiento de numerosas otras agencias federales que siguieron las órdenes de eliminar las menciones a los programas e iniciativas de inclusión y equidad después de la toma de posesión del segundo mandato de Trump el 20 de enero.

El Servicio de Impuestos Internos y los Institutos Nacionales de Salud fueron los primeros afectados por las nuevas directrices, eliminando políticas y fondos asociados con estas prácticas de equidad; por su parte, el ejército de EE.UU. prohibió la presencia de personas transgénero, una medida que, no obstante, de momento ha sido bloqueada temporalmente por la Justicia.

Una igualdad tardía

La NASA cargaba con una histórica deuda con la igualdad y la inclusión desde sus primeros pasos. El ejemplo más evidente es que las doce personas que caminaron sobre la Luna durante las seis misiones Apolo entre 1969 y 1972 eran hombres blancos de entre 36 y 47 años.

Hubo que esperar más de una década, a 1983, para ver a la primera mujer estadounidense, Sally Ride, volar al espacio (mucho después que la soviética Valentina Tereshkova, quien se convirtió en la primera astronauta femenina en viajar más allá de las fronteras terrestres en 1963). El mismo año se pudo ver al primer astronauta afroamericano de la NASA en el espacio, Guion Bluford (quien tampoco fue la primera persona de color en estar asignado a una misión espacial, porque la URSS también se adelantó con Arnaldo Tamayo Méndez, de ascendencia cubana, en 1980).

En los últimos tiempos, la NASA ha impulsado campañas de visibilización y acciones como la primera caminata espacial únicamente femenina. La nueva administración no parece estar por la labor de continuar con esta labor.

Los siguientes pasos del Programa Artemis

Hasta la fecha, del nuevo programa lunar de la NASA solo ha despegado la misión Artemis 1, el primer vuelo de prueba sin tripulación que orbitó la Luna en noviembre de 2022. Tras sufrir varios retrasos, Artemis 2 está programada para abril de 2026. De hecho, ya están asignados los cuatro puestos, entre los que se encuentran Christina Koch, y el afroamericano Victor Glover, quienes serán la primera mujer y el primer afroamericano en estar asignados en una misión lunar.

Artemis 3, la primera misión del nuevo programa lunar de la NASA que aterrizará en la Luna, está programada para mediados de 2027 y, de momento, no hay nombres asignados a la tripulación.

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