Valor en alza

Desde que el PSOE sufriera sus dos grandes descalabros políticos, autonómicas y generales, anda un poco nervioso en busca del líder que vuelva las aguas a sus cauces naturales. Y en estos momentos, junto a los pesos pesados de la ideología ya suficientemente conocidos y protagonistas de los resultados adversos, surgen carismas nuevos, pero con la suficiente categoría para que su voz sea escuchada y analizada.

Y entre los que destacan se encuentra el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page , que últimamente copa páginas y espacios de comunicación por sus palabras serenas que llaman a la unión del partido y al encuentro de la personalidad idónea que tome las riendas que abandona, en buena hora, José Luis Rodríguez Zapatero .

García-Page está siendo la autoridad respetada en el maremagnum de declaraciones partidistas, y como además su ejecutoria avala con dignidad todo lo que expresa, nada de extraño tiene que nos encontremos ante una sensación regeneradora que acoge aplausos unánimes con las declaraciones que enjuicia con serenidad lo que es importante para el PSOE de cara a su futuro.

Nos encontramos con un valor en alza al que habrá que seguir con detenimiento por lo que puede significar cuando los socialistas elijan la opción más valiosa para volver a ser la fuerza que las urnas abandonaron de forma casi fulminante. Conviene lo novedoso antes que una veteranía que viene a ofrecer más de lo mismo, donde no se encuentra nada para aplaudir y presumir.