Los primeros cruceros llegan a Santorini tras los terremotos
Los científicos han dado luz verde para la llegada de los primeros cruceristas. Se espera que en abril atraquen 35 cruceros
Los puertos imprescindibles en un crucero por las islas griegas

Miles de terremotos fueron la causa de que las autoridades helenas declarasen en Santorini el estado de emergencia el pasado mes de febrero. Este domingo, y tras varias semanas sin que ningún crucero se acercara a la isla perla del Egeo por razones ... de seguridad, atracó un crucero de la compañía `Celestyal Cruises´ en el que viajaban cerca de 1.700 turistas, la mayoría de ellos provenientes de los Estados Unidos.
Su llegada fue todo un acontecimiento tras varias semanas en las que, debido a un fenómeno tectónico conocido como 'enjambre sísmico', las autoridades helenas tuvieran que declarar el estado de emergencia en la isla debido a los problemas tras el desprendimiento de tierras en muchas zonas, incluida la Caldera, y el riesgo alto de que se produjera un terremoto cuya magnitud superase los 5,5 en la escala de Richter y un tsunami.
El fenómeno, que se conoce como enjambre sísmico, se caracteriza porque, a diferencia de un terremoto típico, donde un temblor principal va seguido de réplicas, se producen múltiples temblores de baja intensidad en un área geográfica concreta y en un corto periodo de tiempo. Normalmente, este fenómeno se genera cuando hay actividad volcánica y el caso de Santorini no ha sido una excepción: según los expertos, el crecimiento del magma del volcán subacuático Kolumbo, al noreste de la isla, produjo la entrada de magma en las estructuras tectónicas cercanas a la falla de Ánidros.

«Santorini vuelve a funcionar con total normalidad», anunció hace pocos días Olga Kefaloyani, ministra de Turismo de Grecia durante una entrevista con la CNN en la que mandó un mensaje de tranquilidad para quienes están dudando si visitar el lugar durante la temporada alta de turismo.
Éxodo masivo
A principios de febrero, y ante la intensa actividad sísmica, más de la mitad de los isleños abandonaron la isla y se refugiaron en Atenas y otras ciudades de la Grecia continental. Durante semanas, los colegios permanecieron cerrados, se limitó el acceso a determinadas partes de la isla y se prohibieron los eventos multitudinarios en espacios cerrados.
Las fotografías de los callejones encalados completamente vacíos dieron la vuelta al mundo, en una isla que nos tiene acostumbrados a imágenes de las largas colas en el teleférico que comunica el puerto con la capital de Santorini; los atardeceres en Oia, donde no cabe un alfiler, o los atascos en la deficiente red de carreteras de la ínsula, en la que circulan medio millar de autocares, 4.000 minibuses y furgonetas, y una centena de quads, además de los propios vehículos de los residentes y los de alquiler.
En Santorini residen 15.550 personas (aunque en invierno este número se reduce considerablemente). Según un informe del Defensor del Pueblo publicado el pasado verano, cada año la isla recibe a 5,5 millones de turistas, de los cuales, 1,3 millones, llegan en crucero. Según la Unión de Puertos de Grecia (ELIME, por sus siglas en griego), el año 2024 fue clave para los cruceros, con un aumento de 5.490 y 7.927.709 cruceristas a Grecia, registrándose un aumento 260 llegadas de barcos y 924.559 de visitantes en comparación con 2023. El pasado verano, la llegada masiva de turistas llevó a Panos Kavalaris, concejal de Santorini, a pedir a los isleños, a través de sus perfiles en redes sociales, que redujeran sus desplazamientos el día previo a la llegada de 17.000 turistas a la isla.

Durante los meses de julio y agosto, cuando se produce la mayor llegada de turistas por aire y mar, la gestión de los recursos hídricos de la isla, azotada desde hace años por la sequía extrema, así como la recogida de residuos y los problemas con el suministro eléctrico, suponen un auténtico quebradero de cabeza para las autoridades locales. Por ello, Nikos Zorzos, alcalde de Santorini, pidió el año pasado la reducción del número de visitantes que llegan en cruceros a la isla, y el primer ministro griego ha anunciado que, durante los meses fuertes de la temporada turística de este año, los cruceristas que deseen visitar Santorini y Miconos –las dos islas del archipiélago de las Cícladas que más sufren las consecuencias de un turismo hipermasificado–, deberán abonar una tasa especial de 20 euros, mientras que la tarifa en el resto de las islas será de 5 euros.
A pesar de las restricciones, la ELIME prevé un aumento del 10% en la llegada de cruceros de un 10% para este 2025, ya que todo apunta que los fenómenos volcánicos y sísmicos registrados en la isla supondrán un nuevo aliciente que atraerá a decenas de turistas de todo el mundo.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete