Las infecciones de transmisión sexual continúan disparadas y afectan sobre todo a los jóvenes
Todas las enfermedades alcanzan las mayores tasas desde que existen los registros y en general afectan más a los hombres
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Las infecciones por transmisión sexual no dejan de crecer en España. En las dos últimas décadas la tendencia ha sido ascendente, pero en los últimos años ese incremento es cada vez mayor. Pese a que durante los peores años del Covid-19 las cifras descendieron, en 2022 volvieron a subir a niveles superiores a los de los años prepandemia. Así se desprende del 'Informe de Vigilancia Epidemiológica de las Infecciones de Transmisión Sexual de 2022', elaborado por la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Renave), publicado este miércoles por el Ministerio de Sanidad.
El informe analiza la infección gonocócica (gonorrea), la sífilis (incluida la congénita), la infección por clamidia y el linfogranuloma venéreo. Sobre la primera, en 2022 se notificaron 23.333 casos, con una tasa de 49 casos por cada 100.000 habitantes que en algunas comunidades asciende hasta los 121,88 (Cataluña) o 63,82 (País Vasco).
La infección gonocócica en España se registra desde 1995. Desde esa fecha y hasta 2001 la tendencia es descendente, pero a partir de ese momento comienza a subir, en los últimos años a niveles muy superiores. Para poder entender la magnitud, la tasa de gonorrea era en 2001 de 2,04 casos por cien mil habitantes, en 2015 de 11,14, en 2021 de 31,40 y en 2022 de 49 casos por cada 100.000 personas.
La mayoría de los casos (el 79,9 por ciento) se dieron en hombres y la mediana de edad al diagnóstico fue de 30 años. Las mayores tasas se dieron entre los más jóvenes: el grupo de entre 20 y 24 años presentó una tasa de 198,23 casos, seguido de los jóvenes de entre 25 y 34 años, con 167,60 casos.
La tasa más alta desde 1995
La tendencia es similar en la infección por sífilis, que en 2022 tuvo la tasa más elevada desde 1995, cuando empezó su vigilancia en España. En 2022 se notificaron 8.141 casos, con una tasa de 17,10 casos por cien mil habitantes. Según el informe, se identifican cuatro puntos de cambio significativos en las tasas de sífilis, en 2001, 2011, 2014 y 2020. En el primer periodo (1995-2001) se observa una tendencia descendente no significativa; de 2001 a 2011 ,la tendencia es ascendente; en el tercer periodo (de 2011 a 2014) hay una estabilización que se rompe a partir de 2014, cuando lo que se observa es una tendencia ascendente de forma significativa.
Como con la gonorrea, las tasas más elevadas de sífilis en 2022 se dieron en hombres (el 89%) y la mediana de edad fue de 37 años. Sin embargo, el grupo de edad con mayores tasas de infección fue el de 25 a 34 años, seguido del de 35 a 44 años. En cuanto a la sífilis congénita, en 2022 se notificaron dos casos que correspondían a un niño y una niña en los primeros meses de vida.
La tasa de la infección por clamidia alcanzó en 2022 los 62,38 casos por cien mil habitantes, con 26.518 diagnósticos. Desde 2016 (cuando empezó el registro) y hasta 2019 la tendencia había sido ascendente, que se frenó en 2020 probablemente a causa de la pandemia y volvió a subir en 2021. Las mayores tasas se dieron en Cataluña (162,92) y Navarra (111,34). Las tasas más altas se dieron en el grupo de entre 20 y 24 años, seguido por el de entre 25 y 34.
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