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Hormigas blancas

«Hay días que no puede levantarse», dice Terelu Campos sobre Ana Obregón

«Hormigas Blancas» volvió nueve años después con un emotivo documental dedicado a la actriz madrileña, que «sobrevive» en su casa de Palma de Mallorca tras el fallecimiento de su único hijo

Ana Obregón, en un programa de Telecinco en 2011 Telecinco

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Trece años después de su inicio, y nueve desde su última emisión, regresó «Hormigas blancas». Lo hizo con un emotivo documental dedicado a Ana Obregón .

El sentido de su vida

El programa recuperó un testimonio de la protagonista registrado el 14 octubre 2011 en un programa llamado «La Caja Deluxe» . Al hilo de una revelación (que ella escribía un diario desde los 12 años), se le plantea que imagine cómo será su vida el 28 de julio de 2020 , y qué le gustaría dejar reflejado en ese diario. Y dice esto: «Que seguimos toda la familia unida, que no falte ninguno. Que mi hijo acabó la carrera y es un economista brillante. Que he encontrado un amor. Me gustaría ese año ser feliz porque decidí serlo».

En esa entrevista en «La Caja Deluxe» también habla de su hijo:

Voz en off: ¿Qué es Álex para ti?

Ana Obregón: Es mi vida. Cuando lo vi entendí porque estaba aquí.

El 9 de abril de 2018 un fuerte tirón de espalda despertó a su hijo en plena noche. Aless tenía 25 años . Fue el inicio del horror. El 13 de mayo de 2020 , la «vida» de Ana murió. El día del funeral de su hijo llevó un vestido que era una réplica de otro que vistió cuando estaba embarazada de Aless, principio y fin para la actriz.

Arropada por los suyos

Los mensajes colgados por Ana Obregón en sus redes sociales tras el fallecimiento de su hijo preocuparon a su familia y seguidores. Como el del pasado 7 de junio, cuando murió la perra de su hijo, Luna , y la actriz escribió: «Pido cada noche que muy pronto pueda estar con vosotros y volver a ser la familia que éramos para siempre. No sé cómo decirlo. Aquí abajo me siento huérfana de hijo y de mi mejor amiga. Os echo infinitamente de menos».

¿Cómo está a día de hoy? Terelu Campos , presente en el plató para comentar las imágenes documentales, intercambió mensajes con la actriz y bióloga hace un par días. «Le cuesta levantarse cada día. Hay días que no puede levantarse», aseguró la hija de María Teresa Campos . «Le dije que está sobreviviendo, no viviendo», contó. Con ella están «sus padres, sus hermanos y sus amigos». Arropándola. «Está todo el entorno pendiente de ella», tranquilizó Terelu.

Ella está pasando el duelo en su casa familiar en Palma de Mallorca . «No tiene fuerzas ni para bajar a ver el mar», añadió Campos, quien contó otro detalle que demuestra su humanidad. «A pesar de cómo está, me pidió el contacto para hablar con Paz Padilla y darle el pésame por la muerte de su marido».

Para animarla, y dado que este año no habrá el tradicional posado playero de Ana –como no lo ha habido desde que enfermó su hijo–, el programa lanzó en su cierre una iniciativa consistente en que la gente cuelgue un posado a lo Obregón con la etiqueta #VaPorTiAna . Fue Nuria Marín la que «inauguró» la iniciativa, que pretende que la actriz sienta el cariño que le tiene la gente tras tantos años de trayectoria.

Un repaso a su trayectoria sentimental

Por supuesto, se repasó la vida sentimental de la protagonista del documental.

Francis Franco y Ana Obregón Telecinco

El primero, al menos que conste, fue Francis Franco, hijo de los marqueses de Villaverde . Ella, que tenía 18 años, llegó incluso a alojarse en el Pazo de Meirás , donde una cabeza de gamba cortada por su cuchillo casi impactó en el entonces jefe del Estado. La relación se inició porque su mejor amiga era Mery , hermana de Francis, que estaba empeñada en emparejarlos. Por cierto, le vino la regla el día en que conoció al dictador.

«Teníamos una magnífica relación. Tengo un magnífico recuerdo de Ana y de su familia. Nos quisimos mucho, y lo pasamos muy bien», apuntó Francis Franco , ya desde el presente, en el documental.

Tras Francis , llegó Miguel Bosé , con el que estuvo algo más de tres años. Eran los tiempos en que el hijo de Lucía Bosé y Luis Miguel Dominguín cantaba «Linda» o la menos conocida «Anna» , que fue número 1 en Italia en 1978 y que estaba dedicada a su (entonces) chica. «En su biografía ella dice que es él quien la desflora», apuntó Carlota Corredera , presentadora de «Hormigas blancas». Terelu Campos aportó más detalles: «Él puso una música de Mozart y la desnudó. Se despertó por la mañana en sus brazos».

Más adelante llegó «Tony» , con el que posó en una revista y del que dijo estar muy enamorada. El tal «Tony» era en realidad un jovencísimo Toni Cantó . En 1984, una revista publica que está viviendo con Julio Iglesias en Miami . Era cierto. Después llegó Cayetano Martínez de Irujo . Fue un entremés antes de otro de sus grande amores, el baloncestista Fernando Martín , fallecido en 1989; por cierto, a la misma edad que su hijo. Cuando murió, ya llevaba seis meses sin salir con él, tras cinco años como pareja. «La única relación que he tenido feliz es con él», confesó en «La Caja Deluxe» en 2011. «Nunca nadie me ha querido como tú. Y yo nunca he querido a nadie como a ti», afirmó en ese programa dirigiéndose al difunto baloncestista.

Tras una fugaz relación con Paco Arango , en abril de 1991 Ana presentó en sociedad a Alessandro Lecquio , entonces un desconocido en España. Se casó con el italiano, tuvieron un hijo, rompieron y después llegó otro madridista, Davor Suker . Tras unos escarceos polémicos con Miki Molina y David Beckham , llegará Darek , su última pareja mediática. Hasta hoy. Porque, como ha dicho en repetidas ocasiones en los últimos tiempos, le tiene «fobia al amor».

La actriz, en un capítulo de «El Equipo A» Telecinco

Su faceta de actriz

En enero de 1981, Ana se fue a vivir a Los Ángeles. A estudiar Arte Dramático . Contactó con Robert de Niro . Estableció relación con Steven Spielberg , al que cocinó una paella que salió tan mal que el arroz quedó de color verde.

Steven Spielberg y Ana Obregón Telecinco

Cuando su carrera estaba a punto de despegar, se le descubrieron unas células precancerígenas en el útero. Eran tiempos de «La pícara Justina» (1983); del rodaje de «Bolero» , con «La mujer 10»; de un especial Fin de Año con Martes y Trece en el que acabó en brazos del escritor Paco Umbral; o de un capítulo del «Equipo A» .

Se recordó su escena más difícil. Una erótica con Alonso Caparrós que Ana rodó horas después de saber que era objetivo de ETA , pues se encontraron detalles del seguimiento que le habían realizado los terroristas en el zulo donde estuvo Ortega Lara . Se habían planteado secuestrarla.

No eran siliconas, sino hormonas

Se ha contado una y mil veces eso de que le estallaron los implantes de pecho en un avión. Se mencionó este asunto en el documental, y también que fue en 1984 cuando la prensa publicó que se había puesto silicona.

Ella lo negó entonces: «Es un tratamiento de hormonas, y estas cosas [por sus pechos] empezaron a crecer», le contó a Umbral en una entrevista en «Interviú» .

Ana y los menores

En el programa se recordó uno de sus escasos enfrentamientos con la prensa. El asunto empezó como una broma: ella roció a unos fotógrafos y redactores con un spray de espuma porque le disgustaba el acoso a su hijo, que entonces tenía tres años. En uno de esos encuentros, Aless también «disparó» nieve contra los reporteros gráficos. Estos, de broma, respondieron del mismo modo, con tan mala suerte que el spray fue a parar a la cara del niño, que se echó a llorar. Ella se indignó y arremetió contra la prensa. Todo era por proteger a su hijo.

«Gracias a Ana Obregón se reguló la Ley de Protección del Menor», apuntó Belén Esteban –también presente en el plató– al hilo de este episodio.

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