parrillada mixta
Nos gustó más el libro
Si lo único que importa es el argumento, la tele es un libro abierto
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Por la escenografía de la pieza, bastante simple, se puede datar el chiste de las dos cabras a mediados de los años ochenta, cuando en España se popularizan unos reproductores domésticos de vídeo cuyo uso se generalizó en torno al Mundial de México. La ... primera se está comiendo una cinta de vídeo, tirada en la era, y reconoce que está muy buena. La segunda –más pretenciosa, mujer de su tiempo; ay, aquella década de los ochenta– le contesta que a ella le gustó más el libro. Fin de la cita. Las cabras que rumiaban en la era son hoy los comentaristas de las series que programan las plataformas de pago. Desde el final de 'Perdidos' no han levantado cabeza, como corresponde a la especie, 'capra aegagrus hircus'.
Esperar a que las productoras de estas miniseries completen y almacenen por lo digital sus respectivas temporadas para poder verlas del tirón tiene para el espectador la doble virtud de evitar esperas y, en el entretanto, de distraerse con los juicios de valor que van dejando por ahí los expertos en el género, por lo general dedicados a la literalidad del guion y al valor de una trama que, como dijo la cabra pretenciosa de los años ochenta, mejor sería consumir en papel. Para qué tanto cine, y para qué tanta tele, si al final lo único que interesa es la historia. Rayano en la ignorancia premeditada y también generalizado, hay un descuido por los aspectos formales de estas producciones televisivas que las devalúa como tales y las reduce a mero folletín por entregas. Que el 'spoiler' se haya convertido en lo que es –todo– revela el grado de deterioro de un proceso audiovisual marcado en los ambientes más distinguidos y ochenteros por la paradoja de la involución. Recordemos que la 'capra aegagrus hircus' viene de la 'capra aegagrus', salvaje y arriscada.
No hemos llegado siquiera a la mitad de 'Noche polar', que dan en HBO, y lo que menos nos interesa es cómo va a terminar la cosa. Coincide la oferta de esta serie con la publicación de 'Pithovirii', disco en el que Aidan Baker se mete despacio y con miedo en las honduras de Tunguska, donde el asteroide. Concluir que este trabajo del compositor canadiense va de virus congelados desde hace decenas de miles de años, de permafrost y de formas de vida latentes es lo que haría una cabra hambrona y primitiva.
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