SIN ACRITUD
Un cabezota
Donald Trump, su personaje, es tan grotesco, tan caricaturesco, que una chirigota de Cádiz lo define mejor que el más sesudo analista político
Al Selu hay que esperarlo siempre. Aunque no te haya gustado su primer pase en preliminares, como es el caso de este año. Juani Wainjaus, su personaje en este Carnaval 2025, es real como la vida misma. Existe como existe el aire que respiramos. Esa ... señora que es propietaria de un 'partidito' de 40 metros cuadrados que se cae a cachos, pero al que le pone un cartelito con una T blanca sobre fondo azul y lo alquila como si fuera el mejor de los resorts en un paradisíaco destino caribeño. A partir de ahí te estafará todo lo estafable. Desde el rollo de papel higiénico al agua caliente o el colchón. Pero siempre con mucha dignidad. «Hay que ver lo que tiene que aguantá la propietaria de un piso ilegá», asegura. El personaje creado por Selu García Cossío es una genialidad. El problema es que al ser tan auténtico, resulta complicado llevarlo a un repertorio encorsetado de pasodobles y cuplés. Pero habrá que darle tiempo y esperar a cuartos de final, donde muy probablemente darán un salto de calidad. Con todo, y sin haber cuajado su mejor arranque de concurso, siempre deja detalles para la eternidad carnavalera. Como la cuarteta del popurrí en la que, hablando de la peligrosidad de que los estadounidenses puedan poseer armas con total libertad, afirma que «Trump no piensa prohibir las armas porque es muy cabezota. A él las balas le entran por una oreja y le salen por la otra». No me digan que la ocurrencia no es magistral.
Y es que, más allá del Carnaval de Cádiz –que es un 'cachondeo' muy serio– lo cierto es que una simple cuarteta de una chirigota define mejor que cualquier sesudo análisis político al presidente de la nación que, mientras no se demuestre lo contrario, sigue siendo la más poderosa del mundo. Trump es perfectamente consciente de la amenaza que supone China para su supremacía económica. Y de ahí que esté lanzando mensajes que realmente no buscan influir en la economía a corto plazo, sino fortalecer la idea de que EEUU es quien manda en el mundo y va a seguir haciéndolo. Reforzando las fronteras para controlar la inmigración, imponiendo aranceles a diestro y siniestro, imponiendo su ley en Oriente Medio... cualquier idea es válida para hacer realidad su slogan de «Make America Great Again». Y si ha de ser extravagante, osado e incluso falto de la más mínima humanidad, como ha hecho diciendo que los gazatíes deben abandonar su tierra, lo hará. Porque como dice Selu, es un cabezota. Y, nos guste o no, a día de hoy, buena parte del futuro inmediato de la humanidad está en sus manos. En las de un cabezota que jamás ha dado muestras de tener unos mínimos valores humanos. Ni personal ni políticamente. Más vale, aunque sólo sea por febrero, refugiarse en el Carnaval y al menos echarnos unas risas. Porque si a Selu hay que esperarlo siempre, a otro genio de la fiesta gaditana como José Guerrero Roldán 'Yuyu', también. Y más si regresa después de años retirado. El domingo canta. Impacientes estamos ya por verlo. El buen ratito está asegurado. Igual que con Donald.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete