Fiat Panda, utilitario, atractivo y familiar
La marca transalpina ha presentado en la fábrica de Pomigliano D’Arco, cerca de Nápoles, la nueva generación del Panda, uno de sus pilares comerciales a escala europea. Todavía no se saben sus precios, pero sí que el coche llega a España en febrero con motores de gasolina (incluso turbo) y turbodiésel Multijet II.
napoles (italia) Actualizado: GuardarLa presentación del nuevo Panda, dirigida por el propio Sergio Marchionne, presidente del grupo Fiat–Chrysler, da idea de la importancia estratégica de un modelo que encuentra sus orígenes hace 31 años, que con ésta vive su tercera entrega absoluta, y que sin duda se ha ganado a pulso su buena fama y aprecio por el público europeo a partir de una destacada versatilidad, un marcado sentido práctico, economía de uso y facilidad de mantenimiento. Por cierto, que Marchionne aprovechó la ocasión para confirmar el firme compromiso de Fiat con Italia para la producción de vehículos, aunque se instalen fábricas en otros países y se aprovechen las factorías de Chrysler para el ensamblaje de ciertos modelos más allá de las fronteras del país de la bota.
Así pues, el Panda nació en 1980. Desde entonces se han vendido más de 6,5 millones de unidades. El desarrollo del nuevo modelo, competidor de vehículos tan variopintos como los Hyundai i10, KIA Picanto, SEAT Mii, Skoda Citigo y Volkswagen up!, ha costado 800 millones de euros, incluidos los 100 millones que ha supuesto la renovación de la fábrica de Pomigliano donde se produce; también ha totalizado 200.000 horas de trabajo. A pesar de ser un automóvil eminentemente utilitario, en la actual versión se han instalado accesorios y sistemas propios de coches de gama superior. La línea exterior conserva características de pequeño monovolumen y 5 puertas como única opción, pero se redondea para ofrecer una imagen más moderna y robusta, alegre y dinámica.
Con una longitud de 3,65 metros, 11 cm superior a la anterior generación, permite acoger a 4 adultos con un maletero mínimo de 225 litros, que son 260 ajustando en longitud la banqueta trasera, o bien 870 litros venciendo los respaldos traseros por completo. Sirva como muestra para comprender el trabajo realizado por los diseñadores en términos de habitabilidad que las plazas traseras permiten acomodar personas de 1,85 metros de altura sin agobios.
También dentro, acabados sencillos pero sólidos y sugerentes, con curiosidades como el freno de mano con forma de «ratón» de ordenador para ahorrar espacio, o la terminación bicolor del panel de instrumentos, que transmite un aspecto agradable y juvenil.
Dispone en opción de multimedia y navegador Blue&Me TomTom2 Drive, situado en el centro del tablero, con una práctica pantalla táctil para gestionar desde la navegación al teléfono y el sistema de sonido, pasando por el dispositivo eco:Drive ideado para planificar rutas, el Start/Stop, el indicador de paso de marcha, el botón ECO de la versión TwinAir Turbo (para reducir potencia modificando el mapa de la inyección y bajar así el consumo) y la frenada de emergencia en ciudad LSCM (Low Speed Collision Mitigation), que actúa por debajo de 30 km/h puede detener el coche de forma automática ante riesgo inminente de alcance.
La oferta mecánica consta de tres opciones de gasolina y un diésel. Los primeros son el moderno TwinAir de 2 cilindros fruto de la corriente downsizing. Desplaza 0,9 litros y da 65 CV, en el caso del atmosférico, o bien 85 (177 km/h) en versión turbo. No falta un renovado, sencillo, robusto y fiable 1.2 Fire aspirado de 65 CV (165 km/h y 5,2 l/100 km), que a buen seguro acaparará buena parte de las ventas por su previsiblemente ajustada tarifa de compra. En cuanto al diésel, la única alternativa pasa por al actualizado y austero 1.3 Multijet II de 75 CV (168 km/h y 3,9 l/100 km) con Start/Stop. Todos son de tracción delantera, con caja de cambios manual de cinco velocidades.
ABC Motor ha tenido ocasión de conducir el nuevo Panda por la ciudad de Nápoles y alrededores, y además con todas sus motorizaciones. En particular, el TwinAir Turbo es realmente agradable de llevar, tanto en ciudad como en carretera, por la brillante respuesta al acelerador, su apreciable reprís y el bajo consumo (4,2 l/100 km) que arroja, y que supone emisiones de sólo 99 g/km.
Su nuevo chasis, con dirección electroasistida y ESP, entre otros, ofrece un comportamiento superior, comunicativo y firme en conducción rápida. En conjunto, es un coche muy agradable de conducir y sobre todo práctico en ciudad destacando, tan habitable como confortable. A destacar la frenada de emergencia en ciudad, que a buen seguro evitará muchos pequeños golpes cotidianos.