Un ataque con más de 150 misiles de Hizbolá pone a Israel en Estado de Emergencia
«La primera fase de la respuesta al asesinato de Fuad Shukr ha acabado, dice el grupo paramilitar
Nasrallah señaló que el objetivo era «una base de inteligencia militar israelí»
Los rebeldes hutíes de Yemen incendian un petrolero en el mar Rojo
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Israel lanzó este domingo una ofensiva aérea preventiva sobre Líbano y dijo haber frustrado con ella un ataque a gran escala de Hizbolá. Sin embargo, el grupo paramilitar respondió con el mayor ataque con misiles y drones desde que estallara el conflicto el 7 ... de octubre. Hizbolá confirmó que es «la primera etapa de respuesta al asesinato del líder Fuad Shukr». Las autoridades israelíes declararon el Estado de Emergencia para las siguientes 48 horas por la ofensiva, aunque las restricciones se suavizaron tiempo después.
«En un acto de autodefensa para eliminar estas amenazas, las Fuerzas de Defensa Israelí (IDF por sus siglas en inglés) están atacando objetivos terroristas en el Líbano, desde los cuales Hizbolá planeaba lanzar sus ataques contra civiles israelíes», según informó el portavoz de IDF, el almirante Daniel Hagari.
El primer ministro libanés, Najib Mikati, convocó de emergencia a su gabinete de seguridad para hacer frente a los acontecimientos. Citó a «los amigos del Líbano para detener la escalada» y «ha pedido el fin de «la agresión israelí»
De la misma manera, la oficina de la coordinadora especial de las Naciones Unidas para el Líbano, Jeanine Hennis-Plasschaert, y la fuerza de mantenimiento de la paz de la FPNUL han instado a «todos a cesar el fuego y abstenerse de nuevas acciones de escalada».
Ataque preventivo
La ofensiva de Israel constó de la movilización de «aproximadamente 100 aviones de combate» que «atacaron y eliminaron miles de cañones lanzacohetes de Hizbolá, que estaban destinados a ser disparados inmediatamente hacia el norte y el centro de Israel», dijo la IDF en un comunicado. Añadió que más de 40 bases de lanzamiento de proyectiles del grupo paramilitar libanés fueron atacadas y afirmó que «haremos todo lo que sea necesario para defender a nuestros civiles y al Estado de Israel».
Hizbolá, afín a Irán, respondió que Israel estaba haciendo «afirmaciones vacías» de haber frustrado un ataque mayor, y dijo que su propia operación del domingo «se completó y se cumplió». El grupo dijo que sus militantes lanzaron «una gran cantidad de drones» y «más de 320» cohetes Katyusha contra «posiciones enemigas» al otro lado de la frontera. El IDF afirmó que Hizbolá lanzó más de 150 proyectiles desde Líbano a Israel durante la madrugada. Según el líder de Hizbolá, Hasan Nasrallah, «Los misiles eran para despistar al Iron Dome y otras defensas militares para que pudieran entrar los drones en el espacio aéreo israelí y todos los aviones no tripulados lanzados correctamente entraron en el espacio aéreo israelí».
حـ.ـزب الله ينشر فيديو لقواعد وثكنات إسرائيلية يقول إنه استهدفها في المرحلة الأولى من ردّه على اغتيال فؤاد شكر، في الضاحية الجنوبية لبيروت #حرب_غزة #فيديو pic.twitter.com/5ynCUBIVV0
— الجزيرة فلسطين (@AJA_Palestine) August 25, 2024
La ofensiva de Hizbolá fue la respuesta a Israel tras el asesinato a principios de mes de Fuad Shukr, uno de los líderes de Hizbolá, horas después del homicidio en Teherán (Irán) del dirigente de Hamás, Ismael Haniyeh. Ambas muertes proyectaban una escalada del conflicto como prometió Irán, que ha tardado en llegar, según dijo Nasrallah debido a las movilizaciones masivas de militares israelíes y estadounidenses. Nasrallah señaló que el objetivo era «una base de inteligencia militar israelí, a un kilómetro y medio de Tel Aviv», pero Israel dijo que la dicha base, Gilot, no fue alcanzada.
Al final, más de 600 personas han fallecido en el lado libanés, en su mayoría combatientes de Hizbolá, entre ellos, también han fallecido al menos 131 civiles, según un recuento de la agencia AFP. En cambio, en el lado israelí, las autoridades dicen que han muerto 23 soldados y 26 civiles.
La ofensiva de Hizbolá ha sido la respuesta a Israel tras el asesinato a principios de mes de Fuad Shukr, un comandante de alto rango, horas después del homicidio en Teherán (Irán) del líder de Hamás, Ismael Haniyeh. Ambas muertes proyectaban una escalada del conflicto como prometió Irán, que ha tardado en llegar.
No obstante, mientras Irán todavía no ha hecho grandes movimientos a petición del primer ministro Masoud Pezeshkian, contrario a los deseos de venganza del ayatolá Jamenei, líder supremo de Irán; el grupo paramilitar libanés Hizbolá ha mantenido la guerrilla prácticamente a diario hasta haber intentado una ofensiva a gran escala, presuntamente frustrada por Israel.
Coincide, además, con el aumento de las tensiones a raíz del ataque, el pasado sábado, de los rebeldes hutíes de Yemen, afines a Hamás, a un petrolero de bandera griega en el mar Rojo.
Por el contrario, el enquistado conflicto lleva semanas de esfuerzos de diplomáticos estadounidenses, como el secretario de Estado Antony Blinken; qataríes y egipcios, el emir Tamim bin Hamad Al Thani y el presidente Abdelfatah El-Sisi respectivamente; impulsando negociaciones entre Israel y Hamás en favor de un alto el fuego e intercambio de rehenes.
Según Blinken, Israel está dispuesto a aceptar la propuesta estadounidense de tregua. Asimismo, el nuevo líder de Hamás, Yahya Sinwar, aceptaría también, pero con una serie de condiciones, entre ellas, que se garantice su seguridad y su vida.
Se espera que para el domingo se reanuden las conversaciones sobre el cese de las hostilidades en Egipto. Israel ha mandado una misión diplomática con agentes del Shin Bet y del Mossad —servicios de inteligencia de Israel de interior y exteriores, respectivamente—, mientras que Hamás sostiene que no participará en las negociaciones, pero será informado por El Cairo.
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