La vida personal de Yolanda Ramos, invitada de 'La Revuelta': su historia con la salud mental, sus inicios como vedette y su exmarido

Yolanda Ramos lleva años conquistando el corazón de los espectadores tanto en la pequeña pantalla como en el cine dos décadas. Es difícil olvidar sus imitaciones en aquel mítico 'Homo Zapping' que le dio notoriedad y la colocó en la cúspide de la comedia.

Sin embargo, es probable que su mayor momento de fama haya llegado en los últimos años, especialmente entre los jóvenes gracias al éxito de 'Paquita Salas' y su personaje, Noemí Argüelles, que forma en sí mismo toda una cultura pop.

Ramos es una obrera de la interpretación, una estrella que no vive con ese estatus pero que lo es y que es muy consciente de lo que cuesta mantenerse en la brecha y ganar dinero en un mundo tan ciclotímico como el del cine y la teelevisión.

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Tan consciente es que, incluso, habiendo confesado sufrir depresión recientemente, nunca pidió una baja: «No puedo parar un año, porque soy autónoma y porque me olvidarían. Ha habido momentos en los que no podía ni coger el teléfono, pero tienes que volver a salir a hacer reír», dijo el pasado año en el programa de LaSexta 'Encuentros Inesperados'.

Siempre ha sido sincera sobre su salud mental, incluso cuando nadie daba el paso de sacar a la luz un asunto no sólo recurrente sino de vital importancia.

«Fui una niña muy sensible artísticamente hablando. Me hacía infeliz ver que mis padres no se llevaban bien, el ruido de los coches, la luz fluorescente... Me tomo pastillas antidepresivas para no estar siempre así porque si no no lo aguantas. Yo no era feliz así», contó hace unos años en la Cadena Ser.

Pese a estos escollos ella siempre ha seguido adelante, interpretando papeles icónicos como en la película 'Carmina y amén', que le valió una nominación a los Goya, o siendo el carisma en persona en programas como 'Tu cara me suena' o 'Celebrity Bake Off'.

Un éxito que ha ido alcanzando paso a paso, sin estridencias, pero con enormes interpretaciones que le han hecho ganarse un hueco entre los grandes, por talento, por gracia y porque cuando se quita la careta y es ella misma también llena la habitación.

Su carrera, al inicio de la veintena, la comenzó como vedette en 'El Molino' de Barcelona: «Hacía estriptis integrales con un mantón de manila. Mi familia fíjate que no me dijo nada. Tenía 22 años», le dijo a Samantha Villar en una entrevista. Después se dio cuenta de cuánto amaba hacer reír y el talento innato que poseía para ello y para allá que fue.

En lo personal, Ramos mantuvo una relación de 14 años con Mario Matute, un hombre 11 años menor que ella (29 y 44 cuando se conocieron) a quien conoció durante el fallido 'Saturday Night Live' español, donde él ejercía de técnico.

Juntos tienen una hija, Charlotte, nacida en 2013, después de muchos problemas para que Yolanda se quedara embarazada con parejas anteriores y tuviera que recurrir a la ciencia tras varios abortos. Con Matute, sin embargo, se quedó embarazada de forma natural. El destino.

Ese amor idílico, sin embargo, terminó. Algo que la actriz, de ahora 56 años, anunció de manera sosprendente a principios de este 2024, cuando durante su paso por 'La script' de la Cadena Ser recordó los momentos en los que se encontraba rodando la serie 'Un nuevo amanecer'.

«Hacía un mes que había muerto mi madre y hacía muy poco que me había divorciado, con lo que eso significa», dijo, meses después de que ambos hechos se produjeran. Sin embargo, ambos mantiene una buena relación tras el divorcio.