Terelu Campos ataca a Carmen Borrego por la salud de su madre: «Estás victimizando»

Fue el pasado 10 de enero cuando María Teresa Campos, de 81 años, ingresaba en el Hospital de la Luz en Madrid, tras varios meses atravesando algunos baches de salud. «Una persona de cierta edad tiene que hacerse unos chequeos», aseguró en su momento su hija, Terelu Campos, sin darle demasiada importancia.

Pese a intentar transmitir tranquilidad, lo cierto es que la emblemática presentadora de televisión no ha vuelto a la escena pública debido a su delicado estado de salud. Desde hace meses, la veterana periodista pasa sus días encerrada en su casa de Aravaca, y tan solo pisa la calle para dar pequeños paseos o para acudir a eventos familiares.

Este viernes 9 de junio, la mayor de las hijas de María Teresa Campos se ha sentado en el 'Deluxe' para sincerarse como nunca sobre la salud de su madre.

Sobre la inminente cancelación de 'Sálvame', programa en el que tanto ella como su hermana Carmen Borrego trabajan como colaboradoras, la mayor de las hermanas confesó que su madre no estaba al tanto. «No sabe que termina 'Sálvame', no sé si se lo voy a contar porque no sé si es bueno para ella», aunque «sabe que presento pero apenas lo ve. Cuando lo ve, a mí me hace mucha ilusión».

«Ya hemos contado por activa y por pasiva la situación de mi madre. Cuando le conté que había sido bisabuela me puso una cara que merecía la pena. Estamos en un momento en el que le damos amor porque es lo que ella nos ha dado siempre», apuntó la pequeña de las hermanas.

Sin embargo la tensión llegó cuando María Patiño recordó el malestar que le causo a Terelu que su hermana hablase sobre la delicada salud de su madre. Y es que Carmen confesó públicamente su miedo a que un día su madre dejase de reconocerles. «Creo que decir eso, para mí, es ponerse en una posición de victimismo que yo no comparto», opinó Terelu. «No me estoy poniendo de víctima, estoy diciendo lo que siento. Chica, yo ya no sé lo que hacer», le respondió Carmen visiblemente enfadada.

«Estamos hablando de una persona que es lo mismo para ella que para mí. Creo que sí tengo derecho en manifestar mi opinión, claro que lo tengo. Porque ni es más para mí, ni es más para ella», puntualizó la mayor. «Pero yo también tengo derecho a expresarme», se quejó Carmen. «Hay cosas que pertenecen a la intimidad y que se pueden recoger en los medios de comunicación de muchas maneras, que a mí no me gustaría que se hiciera sobre mi madre», le volvió a regañar su hermana. «Yo corregiré, si se entiende como corregir, tantas cosas que piense que pueden perjudicar a mi madre, y me da igual que vengan de mi hermana, de mi hija, de quien sea. Yo no voy a ocultar que mi madre es evidente que tiene un deterioro muy importante», puntualizó. «Pero si lo digo yo no vale», le interrumpió Carmen, momento en el que creció la tensión entre ambas.

«Yo no he dicho eso, estás tergiversando y me puedo empezar a enfadar. Estoy intentando no enfardarme. Puedo empezar a enfadarme y lo estoy intentando, de verdad. A mí no me gusta que se tergiversen mis palabras, porque yo no he dicho que no se diga que mi madre tiene un deterioro cognitivo importante, no. Pero una cosa es que yo diga que mi madre tiene un deterioro cognitivo muy importante, con toda la pena que eso conlleva para todos, y otra cosa es que yo te cuente a ti lo que hace mi madre en un momento dado cuando yo voy a su casa. Para mí, son pasos diferentes. Y si se entiende bien, y si no, pues lo siento», sentenció.