Sin rastro de sustancias tóxicas en los pinchazos registrados este verano en el País Vasco

El goteo constante de pinchazos ha sido el principal motivo de preocupación en las fiestas populares celebradas este verano en el País Vasco. Según los datos que ha hecho público el Gobierno vasco este martes, un total de 127 personas han referido haber sentido una punzada mientras se encontraban en alguno de los recintos festivos. Sin embargo, en ninguno de los casos se ha detectado la presencia de sustancias tóxicas en los exámenes médicos que han realizado los centros sanitarios.

A pesar de que más de 120 personas han contactado con la policía por haber sentido una punzada, únicamente se han formalizado 49 denuncias por este hecho. La mayoría, 42, corresponden a mujeres, aunque también hay siete hombres que han denunciado haber sido víctimas de esta oleada de pinchazos.

El portavoz del Gobierno vasco, Bingen Zupiria, reconocía en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que se trata de un fenómeno que ha generado «cierta alarma» en los últimos meses. Ha explicado que en todos los casos los protocolos activados «han funcionado correctamente» lo que ha permitido una atención temprana de las víctimas.

En cualquier caso, la Ertzaintza no tiene constancia de que tras estas prácticas se encuentre ningún tipo de forma delictiva organizada. Es más, en ninguno de los casos se han producido ni agresiones, ni robos después de haber pinchado a una persona. Además, tampoco «consta» que ninguna de las denuncias presentadas haya derivado en alguna imputación. Zupiria ha destacado que en gran medida se debe a la «dificultad» que existe para calificar penalmente este tipo de agresiones.