El 60 por ciento de la radicalización violenta en Cataluña en 2024 fue por yihadismo

Ante cada radicalismo detectado se han aplicado bien intervenciones educativas, policiales, sociales o judiciales. «Los mecanismos de intervención han conseguido frenar y revertir los procesos [de radicalización] y se ha reducido la amenaza en la mayoría de casos», precisan desde el Cuerpo. Del total de alertas recibidas, cuatro han sido notificadas a la Fiscalía de Menores, por implicar a menores de 14 años, especialmente vulnerables ante discursos extremistas. Otros ocho ante la Fiscalía, que ha instruido diligencias penales. Cuatro vinculadas al yihadismo; tres, a la ultraderecha y una último «sin ámbito definido».

Durante el año pasado, se identificaron 206 alertas, aunque finalmente sólo 159 se clasificaron como posibles procesos de radicalización. Los 47 restantes fueron «casos de impacto educativo y social», que se abordaron directamente desde el ámbito escolar. Todas las detecciones fueron en «primeras etapas», sin que llegasen a constituir una amenaza para la sociedad, precisa la Policía catalana.

Noticia Relacionada

Cazadores de odio tras el racismo, la homofobia y la violencia contra indigentes

Elena Burés

estandar

No

FISCALÍA DE DELITOS DE ODIO

Los planes de prevención de extremismos violentos (PREV) se implementaron en 2015, cuando la Policía catalana, junto a otros departamento del Govern, desde Prisiones a Educación, comenzaron a desplegar protocolos para tratar de detectar, en etapas incipientes, los procesos de radicalización. Mecanismos que no fueron efectivos en el caso de los atentados de Barcelona y Cambrils, pero que, con el paso de los años, se han «consolidado como principal herramienta para prevenir la radicalización violenta», ha apuntado el Cuerpo en una nota de prensa.