el campo
Montilla-Moriles reduce el alcohol de sus vinos para llegar a los jóvenes
La UE permite al marco poder comercializar el fino con 14 grados, medio punto menos que hasta ahora
La Cata del Vino Montilla-Moriles de Córdoba se celebrará en la Ribera y en horario de 12.00 a 20.00

Desde hace algunos años la Denominación de Origen Protegida (DOP) de Montilla- Moriles lleva años luchando para aumentar los niveles de consumo de sus caldos, sobre todo con medidas que permitan llegar a nuevos nichos de mercado como es el caso de la población juvenil. Todo ello para revitalizar a este sector agrícola que ha estado marcado desde hace un par de décadas por la pérdida de superficie de viñedo y la reducción de la cifra de viticultores dada la menos rentabilidad de este cultivo.
La última de las medidas puesta en marcha, que ha sido la reducción de la graduación de los vinos, recibió recientemente el visto bueno de la Unión Europea (UE) tras la aprobación de la Junta de Andalucía y del Gobierno de España.
Según informó a ABC el gerente del consejo regulador de Montilla-Moriles, Enrique Garrido, «este proceso lo llevamos trabajando desde hace más de cuatro años las DOP de vino de Andalucía en colaboración con el Gobierno andaluz y el primer objetivo era unificar determinados términos que en cada marco se recogía de manera distinta en sus pliegos de condiciones, de forma que el término «fino» se refiriera al mismo tipo de producto en Málaga, en el Condado de Huelva, en Jerez y en Montilla-Moriles».
Estas cuatro marcas de protección también tenían claro que tenían actuar ante los cambios de gustos y demandas de los consumidores, siendo uno de ellos bajar el grado alcohólico a productos como el fino, «una variedad que se comercializaba hace 50 años a 17 grados», indicó el representante vitivinícola, quien agregó que «en los últimos años hemos conseguido mejorar nuestras técnicas de elaboración y de crianza, lo que nos permite ser más eficientes y ofrecer los caldos con menos graduación, respondiendo así a las nuevas peticiones del mercado».
Lo aprobado ahora por Bruselas es permitir al sello de calidad cordobés y al de Jerez poder comercializar sus vinos con 14 grados, uno menos de los que exigía la normativa vigente hasta el momento En este sentido, Garrido apuntó que «es verdad que nuestra DOP ya lo tenía en parte resuelto porque, al obtener finos de manera natural sin alcohol añadido, teníamos el límite puesto por la UE en los 14,5 grados, mientras que en Jerez está a 15». Esto provocará que el pleno de Montilla-Moriles tenga que convocarse para ratificar esta modificación de su normativa interna, algo que está previsto durante el primer semestre de 2025 tras la presentación de una propuesta por parte de una comisión técnica creada a tal efecto el pasado mes de diciembre.
El gerente afirmó que la elaboración de los caldos con estas nuevas condiciones no supondrá ninguna merma de las características organolépticas ni de la calidad de los mismos. «Lo único que cambia es que ahora tenemos técnicas más eficientes para la preparación de nuestras producciones», según detalló. En esta línea, señaló que participan en un grupo operativo con la Junta de Andalucía para «demostrar científicamente que un vino a 15 grados es exactamente igual que uno a 14 en cuanto a su sabor y su olor».
En cuanto al origen de las nuevas demandas que han llevado a los consejos reguladores andaluces a impulsar estos cambios, Garrido declaró que es el mercado nacional, que es donde realizan la gran mayoría de sus ventas. Según subrayó, esta es no es la única medida que ha impulsado el marco montillano para hacer más atractivos sus vinos.
Vinos jóvenes
«Nosotros hemos sido bastante proactivos y hemos avanzado bastante en este camino, como demuestra el hecho de que nuestro reglamento recoge desde 1985 la definición de vinos jóvenes, mientras que otras denominaciones como Jerez se han quedado encorsetadas en los generosos», apuntó.
Por su parte, el gerente de Bodegas El Monte, Antonio López, resaltó que «es evidente que todo lo que sea, desde el punto de vista comercial, reducir el alcohol o manufacturar lo menos posible el producto ganamos en originalidad y en identidad». También subrayó las ventajas en este aspecto de la zona de Montilla-Moriles frente a Jerez.
«Nosotros, al obtener la uva con una menor cantidad en azúcar, conseguimos unos mayores índices de rendimiento», según explicó el directivo, quien defendió esta reducción «porque vamos a lanzar un mensaje nuevo a los consumidores noveles al vincular el vino a la cultura de nuestra zona, así como que nuestros caldos son más frescos».
Menos ventas en el exterior
No fue 2024 un buen año para la exportación del vino producido en Córdoba. Según los datos publicados la semana pasada por el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, las ventas el año pasado se situaron en los 3,1 millones de euros, frente a los 3,76 que se registraron en el ejercicio anterior, lo que supone un descenso superior al 17 por ciento. Esta bajada es mayor si la comparación es con el escenario que había hace una década, cuando se contabilizaron 5,47 millones, casi 2,5 millones menos que en 2024.
La República Checa es el principal socio comercial de bodegas y cooperativas vitivinícolas con unas operaciones por valor de 590.000 euros, quedado por detrás Países Bajos, con 336.000, destacando este país al cuadruplicar sus transacciones durante el último año.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete