El físico frena de nuevo a Nadal: baja en Barcelona

Laura Marta

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14/04/2023
Actualizado a las 14:13h.

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Rafael Nadal ha confirmado que su cuerpo todavía no está en las mejores condiciones para regresar al circuito. El balear, lesionado desde el pasado 18 de enero, cuando sufrió una rotura en el psoas-ilíaco, no participará en el Conde de Godó que empezaba esta semana y continúan las dudas de si podrá estar en el Mutua Madrid Open (del 24 al 7 de mayo).

Nadal, que arrastraba otra lesión en los abdominales desde Wimbledon y que se agravó en el US Open, apenas ha podido disputar cuatro partidos en este curso: una victoria ante Jack Draper en la primera ronda del Abierto de Australia, y tres derrotas, ante Cameron Norrie y Alex de Miñaur en la United Cup, y ante Mackenzie McDonald en la segunda ronda en Melbourne. En ese partido ante el estadounidense sufrió la lesión en el psoas ilíaco, que el propio Nadal definió como «una rotura importante». Desde aquel momento, al balear se le ha visto realizar ejercicios de fortalecimiento en el gimnasio y algún entrenamiento ya en tierra batida para calibrar el estado de la lesión y de su juego.

El balear se ausentó de la temporada americana de pista dura, siempre más peligrosa para volver de una lesión, y apuntaba a la gira de tierra batida. Sin embargo, el tenista anunció hace unos días que todavía no estaba listo para volver por lo que no jugaría en el Masters 1.000 de Montecarlo, que ha ganado en once ocasiones. Esperaba regresar para Barcelona, torneo ATP 500 en el que ha mordido doce trofeos, pero prefiere apurar un poco más los tiempos para que la lesión no se reproduzca.

Es el principal objetivo de Nadal, pues su mayor meta es Roland Garros (28 de mayo-11 de junio) y evitará cualquier riesgo de empeorar y poner en peligro la conquista del decimoquinto título en la Philippe Chatrier.

Esta ausencia del balear en Barcelona abre las dudas de su presencia en el Mutua Madrid Open, que comienza el 24 de abril. El torneo madrileño sería la penúltima oportunidad de regresar al circuito y comenzar el rodaje competitivo. A partir de ahí, quedaría Roma, del 10 al 21 de mayo, como última parada para calibrar cuerpo, lesión, cabeza y confianza con vistas a Roland Garros. El año pasado, tras fracturarse la costilla en Indian Wells, Nadal solo jugó tres partidos en Madrid (perdió con Alcaraz en cuartos) y dos en Roma (perdió con Shapovalov en dieciseisavos), y llegó listo para ganar su decimocuarto título en París. A eso se aferra este Nadal que sigue buscando darse una nueva oportunidad.