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Un jockey se vuelve loco y la emprende a latigazos con otro jinete en la recta de meta
El sudafricano Gavin Lerena se enfrenta a un castigo tras su violenta acción en el hipódromo Turffontein de Johannesburgo
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
La Autoridad Nacional de Carreras de Caballos de Sudáfrica ha abierto un expediente a Gavin Lerena, destacado jockey del país que este domingo protagonizó una lamentable y delirante escena durante una de las carreras de caballos celebradas en el hipódromo de Turffontein ... de Johannesburgo.
Lerena, un jockey ganador del Grupo 1, montaba a Gimme A Storm en la segunda prueba del programa cuando, de pronto, a unos 200 metros de la meta, se alzó sobre los estribos del caballo y comenzó a golpear reiterada y violentamente con el látigo en la espalda de Jason Gates, el jinete que iba pegado a su derecha.
Gavin Lerena’yı bir müddet pistlerde göremeyiz..🤦🏻♂️
— E.M.Kesebir (@ethemmurat) January 27, 2025
pic.twitter.com/wfWN8tV1Go
Como se ve en el vídeo, en un primer momento Gates, que montaba a Blurred Vision, intenta esquivar los ataques sacando su mano para detener los golpes de látigo dirigidos a su espalda. Lo curioso de la increíble escena es que ninguno de los dos tenía posibilidades de ganar la prueba, toda vez que estaban muy lejos de la cabeza de la misma.
Las imágenes del incidente se volvieron virales y provocaron indignación. Ante el revuelo montado, el agresor emitió una declaración formal en la que pretende disculparse pero acaba echándole la culpa al agredido.
«Lo que ocurrió es totalmente incompatible con mi carácter y lamento profundamente el incidente —afirma—. Extiendo mis más sinceras disculpas a los propietarios y al entrenador del caballo, a mis patrocinadores, a los aficionados a las carreras y a las autoridades pertinentes».
«Quiero aclarar que mi reacción se produjo como respuesta a las acciones previas del señor Gates. En cualquier deporte competitivo, la respuesta instintiva a una amenaza, provocación o agresión percibida puede llevar a una reacción que, en circunstancias normales, no exhibiríamos ni haríamos», prosigue Lerena, que asegura que su rival le provocó y acosó durante la carrera.
«Reconozco que mi respuesta incluye puntos de vista y opiniones. El proceso de investigación permitirá que se consideren todos los factores, durante los cuales presentaré todas los pruebas necesarias», añade.
Y concluye: «Este deporte tiene un lugar especial en mi corazón y sigo comprometido a contribuir positivamente a su reputación. Mi objetivo es defender los valores que hacen que las carreras sean verdaderamente excepcionales. Lamentablemente, el incidente de hoy ha restado valor a ese compromiso y lamento profundamente cualquier decepción que haya podido causar a los apostadores, propietarios, entrenadores, aficionados y directivos».
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