Ter Stegen tiene mala solución

Pronóstico: Ter Stegen ya fue intervenido del tendón rotuliano de su rodilla derecha en agosto del 2020 y en mayo de 2021 para intentar detener el proceso degenerativo en el que estaba inmerso el tendón y que consecuentemente remitiesen las molestias propias del mismo. En el mejor de los casos, este tipo de intervenciones raramente logra revertir el proceso degenerativo y conseguir sanarlo. Por el contrario, el pronóstico mejoraría mucho si la lesión se hubiera producido en el cuerpo del tendón y no en sus inserciones óseas. Así que cuando la rodilla derecha de Ter Stegen realizó una hiperflexión violenta hace apenas 24 horas, su tendón fue incapaz de resistir semejante estrés mecánico. Y, claro, sufrió una rotura total que, como vimos en los instantes posteriores, impedía al jugador estirar la pierna.

Antecendentes: Inmediatamente recordamos una lesión similar que sufrió Ronaldo, el hoy presidente del Valladolid, esta vez en carrera, y que fue si cabe aún mas espectacular. La rotura del tendón rotuliano que sufrió Ronaldo supuso un antes y un después en la carrera del extraordinario futbolista. Los tendones son estructuras mal irrigadas, es decir, la sangre llega a ellos escasamente. Esto hace que en los procesos inflamatorios que produce generalmente la sobrecarga, tengan difícil solución dando con mucha frecuencia paso a lesiones degenerativas del tendón.

Plazo de recuperación: El musculo cuádriceps situado en la cara anterior del muslo y que como sabemos es de una potencia extrema en el futbolista, termina en el tendón cuadricipital, abraza la rótula y se inserta finalmente en la tibia a través del tendón rotuliano. Es pues en este donde converge la enorme potencia que desarrolla especialmente en la práctica del futbol el deportista. Asímismo, es una estructura fundamental en la ejecución del salto. Sin un tendón rotuliano en perfectas condiciones es imposible disputar el fútbol al mas alto nivel. Este es el problema al que se van a enfrentar tanto Ter Stegen como los médicos encargados de realizar la reconstrucción de su tendón. En la actualidad, independientemente de la reconstrucción quirúrgica, se usan elementos biológicos extraídos del propio paciente que pueden contribuir a mejorar el resultado. Hemos de pensar como mínimo en un plazo de recuperación por encima de los ocho meses.

El reto: Queda fuera de toda duda que en los próximos meses el portero del Barcelona se va a enfrentar a una de las situaciones más difíciles que ha tenido en su carrera deportiva.