Fútbol
Terremoto en la Juventus que cierra una época: se marcha Agnelli y su junta directiva
Serie A
La contratación de Cristiano Ronaldo y su faraónico contrato agravaron la situación económica de la Vecchia Signora
En los dos últimos años, el holding financiero Exor, propiedad de los Agnelli, inyectó 700 millones de euros en las arcas del club y ahora su consejero delegado, John Elkann, primo de AGnelli, ha dicho basta, se cambia

La Juventus vive un auténtico terremoto, que supone el fin de una época. Su Junta directiva ha dimitido en bloque y también se va el presidente, Andrea Agnelli. Así lo ha comunicado en una nota el club, tras una reunión extraordinaria mantenida en la noche del lunes en su centro deportivo, conocido como Continassa, porque es la zona de Turín donde se construyó ese espacio de vanguardia para los entrenamientos del equipo.
La clave de la sorprendente decisión está en la implicación de la Juventus en la investigación denominada Prisma, abierta por la Fiscalía de Turín con acusaciones de contabilidad falsa en el balance económico del club. También la Consob (la Comisión Nacional de Sociedad y Bolsa) planteó una denuncia, que obligó a la Juventus a revisar el proyecto de presupuesto, motivando un retraso de la asamblea de socios en dos ocasiones. “Los miembros de la Junta Directiva - se lee en un comunicado de prensa - considerando la centralidad y relevancia de los asuntos legales y técnico-contables pendientes, han considerado, pensando en el mejor interés de la Sociedad, recomendar que Juventus se dote de una nueva Junta Directiva para tratar estos asuntos”.
Se cierra así una época para la Vecchia Signora, una de las etapas de mayores éxitos del club. Desde el 19 de mayo de 2010, fecha en que tomó posesión Andrea Agnelli como presidente, la Juventus ha logrado 18 trofeos: 9 campeonatos consecutivos, 4 Copas de Italia y 5 Supercopas de Italia. Además llegó a la final de la Champions League en dos ocasiones, en 2015 y en 2017.
La contratación de Ronaldo, un fiasco
Viendo que en Italia la Juventus no tenía casi rival, Andrea Agnelli soñó en conquistar la Champions. Para ello contrató en el 2018 a Cristiano Ronaldo por 105 millones de euros, pagando 31 millones de euros netos al jugador portugués. Pero lo que en un principio se consideró que podía ser un gran negocio, se transformó en un fracaso económico y en cierta forma también deportivo, porque la Champions no fue a las vitrinas del club. En cambio, se vieron muy rojos los números de la Juventus. Por ejemplo, a finales de diciembre del 2019, la Vecchia Signora tenía 326,9 millones de deuda financiera neta, incluso después de haber recibido 300 millones por aumento de capital. Sin duda, el contrato de Cristiano Ronaldo pesó demasiado en las arcas del club. Nunca el faraónico salario del portugués fue cubierto por un adecuado aumento de los ingresos. De ahí que al final la marcha de Cristiano Ronaldo fuera incluso una liberación económica para el Club.
Con fecha 30 de junio del 2022, la Junta directiva de la Juventus anunció que en la temporada se había registrado una pérdida de 254,3 millones de euros frente a los 209,9 millones a 30 de junio de 2021. Era evidente que a la Juventus no le salían las cuentas. De ahí que interviniera la fiscalía de Turín y también la Consob, al tratarse de una sociedad cotizada en la Bolsa de Milán. La fiscalía, con la ayuda de la Guardia de Finanzas, en su investigación sobre la contabilidad falsa en el balance económico de la Juventus, puso su atención en una serie de plusvalías realizadas por el club, por valor de 282 millones de euros en tres años, realizándose también el contrato de CR7, aunque el jugador nunca fue indagado.
En estos 12 años, Andrea Agnelli siempre tuvo a su lado a Pavel Nedved, quien tras jugar un período en el Lazio se convirtió en bandera de la Juventus como futbolista y vicepresidente en los últimos años. El checo Nedved fue propuesto como director por Exor, el holding financiero de los Agnelli, en octubre de 2010, convirtiéndose también en uno de los once miembros de la Junta directiva del club, alcanzado la vicepresidencia en el 2015. Ante los fracasos deportivos y económicos de la Juventus, sus dirigentes se vieron obligados a ofrecer al exmanager de la Ferrari, Mauricio Arrivabene, el puesto de consejero delegado, a partir del verano del 2021. Al no levantar cabeza ni económica ni deportivamente, este final se veía venir, entre otras cosas porque, como había trascendido en diferentes ocasiones, no eran idílicas las relaciones de Andrea Agnelli con su primo John Elkann, designado por su abuelo Gianni Agnelli, el fundador de la Fiat, como su sucesor y consejero delegado de Exor, el holding financiero que controla marcas de lujo como la Ferrari, además de la Juventus. Al final, la guerra entre John Elkann y Andrea Agnelli la ganó el primero, el más fuerte. La Exor en solo dos años había inyectado 700 millones de euros en la caja del club. John Elkann tomó nota en septiembre del quinto balance consecutivo en rojo del club y ahora ha dicho basta, se cambia completamente la gestión.
La Junta directiva dimisionaria proseguirá sus actividades, en régimen de prórroga, hasta la junta de accionistas convocada para el 18 de enero de 2023. La Juventus garantiza en su comunicado que "seguirá colaborando y cooperando” con la Fiscalía y la Consob en relación con las acusaciones y denuncias que le han presentado sobre su contabilidad y presupuesto.
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