LAS VENTAS
Mario Navas llegará a su alternativa como triunfador del Certamen de novilladas nocturnas
El vallisoletano gana la final, en la que Valentín Hoyos lidió el mejor lote
Fabio Jiménez y Mario Navas se ganan un puesto en la final con una muy seria novillada

Con un buen ambiente dio comienzo la final del certamen de novilladas nocturnas. Mucha juventud, mucho calor y mucha gente en el patio de arrastre, que aguardaba a Nacho, que acudía por primera vez a la Monumental madrileña como ganadero. Y tuvo un buen estreno, ... ya que la ganadería que comparte con su amigo Talavante echó un primer novillo de nota, como también lo fue el cuarto, de El Freixo. Ambos fueron al lote de Valentín Hoyos, que habría tocado pelo de no ser por la espada. Sin embargo, y contra todo pronóstico, al final ganó el certamen Mario Navas, que dejó lo más torero de la noche. Fabio Jiménez se llevó el lote más bronco y deslucido, y poco más que estar solvente pudo hacer. Lo que sí pudieron hacer mejor los tres fue la suerte suprema. Mucho carretón falta ahí.
Ese primer novillo importante, Jergón de nombre, cumplió en varas, respondió a la buena brega de Juan José Domínguez, y llegó a la muleta con boyantía. Valentín Hoyos, que había brindado al Juli, supo ver la calidad de su oponente, y le sacó partido al natural, por donde el animal iba mejor y más largo aún. Abrochó la faena por bajo, con un doblón despacioso, que fue lo mejor de la faena, junto a la última serie por la zurda. Se tiró bien a matar, aunque perdió la muleta y la espada cayó algo desprendida. No obstante, hubo petición y dio una vuelta al ruedo. Ovación para el de Talavante.
Al pobre Niñero se le picó trasero a más no poder. Se desmonteró Manuel Larios tras un par de mucha exposición, esperando el utrero en ese tercio. Hoyos comenzó en los medios por alto. Entonces cogió la zurda, lo citó largo y allá que fue el de El Freixo, metiendo la cara y con muchísima profundidad. Ralentizó Valentín las embestidas del novillo, y dio muletazos que hicieron sonar los olés rotundos de Madrid. Ya en el tercio, terminó la faena con buenos muletazos a pies juntos, y unas manoletinas para intentar calentar a un público que ya estaba con él. El problema, cómo no, vino con la espada...
El primero de El Freixo, segundo de la tarde, no hizo nada destacable los primeros tercios. Y así llegó, sin definir, a la muleta de un novillero muy hecho como es Fabio Jiménez. Estuvo muy por encima del novillo del Juli, administrándolo y dándole la distancia justa, pero el novillo, pese a noble, no decía mucho. Tesonero se puso el novillero, pasándose de faena, lo que siempre dificulta a la hora de entrar a matar, y más a este chico, que habiendo mostrado ya sus buenas formas en varias ocasiones, y habiendo dejado lo más destacado del certamen hasta la fecha, también ha demostrado que necesita muchas horas de carretón. El quinto poco bueno hizo de salida, pero menos bueno aún en la muleta, en la que pegaba siempre un feo gañafón que deslucía todo lo que intentaba Jiménez. Tras la segunda tanda además se quedaba corto. De nuevo mostró buena disposición el salmantino, pero era imposible con el de Talavante completamente parado.
Intentó Mario Navas recibir al tercero rodilla en tierra, pero el animal deslució la suerte saliendo abanto. Cuatro tardes ha toreado ya el vallisoletano este año en Las Ventas, y ni un novillo le ha dejado torear a gusto con el capote. El de Talavante era tenía el feo defecto del calamocheo, era muy incómodo, y le costaba un mundo humillar, aunque tuvo movilidad. Al natural metía mejor la cara en la muleta, aunque siempre tendía a puntear, y por ahí Navas dio los mejores muletazos de la obra, aunque al conjunto le faltó limpieza. Muy a contra estilo era el novillo, con el que el pucelano estuvo aseado, con todo menos con la espada.
Cerraba la final un animal del Juli que permitió a Navas dejar un bonito quite por chicuelinas. Valentín Hoyos, sabedor de que se había postulado al premio, quitó por gaoneras, dispuesto a aprovechar todas las oportunidades. Torerísimo fue el inicio genuflexo de Mario, abrochado con una trincherilla al ralenti. Mientras los tendidos se peleaban por los vivas y una señora se arrancaba a cantar, Navas dio una gran serie con la derecha. Y si buena fue esa, mejor la siguiente a natural. Pero al novillo había que poderle y llevarlo cosidito. Ahí fue cuando salieron los mejores muletazos de la noche, porque a veces el abelmontado vallisoletano tiene cierta tendencia a ponerse bonito más que a buscar la profundidad, cuando él sabe hacer ambas. La espada cayó un poco trasera por lo que tuvo que coger el verduguillo, con el que falló reiteradamente, aunque intentó hacerlo tan torero como lo hacía su paisano Roberto Domínguez.
CERTAMEN DE NOVILLADAS NOCTURNAS
- Monumental de Las Ventas. Jueves, 25 de julio de 2024. Entrada: 9629 espectadores. Novillos de Talavante (1º, 3º y 5º) y El Freixo (2º, 4º y 6º). Destacaron el primero, de Talavante, y el cuarto, de El Freixo.
- Valentín Hoyos, de lila y oro. Estocada caída (vuelta). Tres pinchazos, estocada y un descabello (saludos)
- Fabio Jiménez, de tacaco y oro. Fea estocada que hace guardia, estocada trasera y dos descabellos (silencio). Estocada (saludos).
- Mario Navas, de verde y oro. Tres pinchazos y media y tres descabellos (silencio). Estocada y cinco descabellos (ovación).
Finalmente se anunció que Jiménez quedaba en tercer lugar, Hoyos en segundo y Navas se proclamaba vencedor. Es el más hecho de los tres, y posee un toreo especial, pero ateniéndonos a todo el conjunto de la tarde, muchos aficionados mostraron su discrepancia con la decisión del jurado. Ojalá este triunfo le dé fuerza de cara a la alternativa que tomará en un mes en su tierra.
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