Hazte premium Hazte premium

Mundo Pixar, la exposición inmersiva que permite recorrer escenarios a escala real de 'Up', 'Cars' o 'Toy Story'

Llega a Madrid la muestra que convierte al visitante en un personaje más de las películas icónicas del estudio

¿De dónde son los personajes de los clásicos de Disney?

Primeras imágenes del gran 'hotel de las princesas' de Disneyland Paris que abrirá en enero

El Museo de las Ciencias de Valencia descubre los secretos de la animación de Pixar en su nueva exposición 'La Ciencia de Pixar'

Jay Ward, director creativo de Pixar, frente al comienzo de la exposición Mundo Pixar ABC
Adrián G. Peñacoba

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Allí, metido en un inmenso gorro de cocina, entre cerezas del tamaño de un balón de fútbol y al lado de un queso del que podrían comer varias familias, se encuentra Remy, uno de los chefs bigotudos más entrañables de los últimos tiempos. Quizás su 'Ratatouille' no sea de estrella Michelín, pero bien valió un Oscar. Allí, en el pabellón 5.1 de Ifema, hasta el 22 de abril, se puede visitar Mundo Pixar, la primera exposición inmersiva del estudio que trae escenarios de diez de las películas más icónicas del estudio de animación.

Desde sumergirse en el mundo de 'Buscando a Nemo' o visitar el Café V8 con el siempre reluciente Rayo McQueen, el recorrido nos invita a pasar por 13 salas tematizadas repletas de detalles, de ilusión y nostalgia, en las que pequeños y no tan pequeños pueden compartir un buen 'selfie' con Sullivan, el peludo azul de 'Monstruos S.A.', visitar la ciudad de los vivos y los muertos de 'Coco', o meterse en la caja de la que escapa Buzz Lightyear en la primera entrega de 'Toy Story'. «Está diseñada especialmente para la inmersión total en los mundos de Pixar. Nunca antes habíamos hecho algo así. Esto va de tu película favorita y ser parte de ella», resume Jay Ward, director creativo de la firma.

Para entrar en el universo imaginativo de Pixar, lo primero es pasar por la puerta de la casa de 'Up', donde espera Carl, el abuelo, junto a un par de sillones, permanentemente dispuesto a acompañar a los usuarios. Siguiendo el recorrido no es difícil acabar en un lugar donde las puertas que se mueven por raíles sujetos al techo, o en la gigantesca habitación de un niño, así percibida por sus propios juguetes. Tampoco faltan referencias a otros clásicos indiscutibles como 'Los Increíbles', 'Del revés', o cintas más actuales como 'Soul', 'Luca' o, la última, 'Elemental'. Cada una ambientada con la banda sonora de su película e incluso un olor característico. Una experiencia inmersiva que dura entre 45 y 70 minutos.

«Tener a un Rayo McQueen a tamaño real es todo un reto», asegura Ward —quien se encargó del diseño de personajes de 'Cars'—, sobre el que se encuentra en la exposición, que podría llegar a pesar una tonelada. También adelanta que hay referencias al código 'A-113', referenciado en varias de las cintas: «Es el número de la habitación en la que estudiaron los grandes directores de Pixar, en la escuela de animación de CalArts». En cada sala, escondida en algún lugar, se encuentra la conocida bola de Pixar, en alusión al mismo detalle que aparece en todas sus películas. Sobre la veracidad de la teoría que conecta todos los mundos de sus películas, el norteamericano responde meridiano: «Nos lleva de 4 a 6 años hacer cada película. La teoría es formidable, pero es imposible hacer algo así».

Un estudio incombustible

El prolongado éxito del estudio de animación —que nació en 1986 y despegó con el primer largometraje de la historia creada enteramente por ordenador: 'Toy Story'— parece no tener fin, más teniendo en cuenta que ya a principios de 2023 se inauguró La ciencia de Pixar, una muestra que desgranaba el proceso creativo de sus filmes. A falta de un día para abrir sus puertas al público, Mundo Pixar ha vendido más de 80.000 entradas —según sus organizadores—, que oscilan entre 12,80€ las más baratas y 39,70€ las más caras. «Madrid es la ciudad a la que queríamos venir primero», explica Nicolás Renna, organizador de la cita, en guiño a la posibilidad itinerante de la misma.

Más aún. Un año después, el estudio parece impermeable a la situación de su penúltimo estreno, 'Lightyear', que a raíz de un beso lésbico fue cancelado en 14 países. También en España se formó gran polémica por su cancelación en un pueblo de Cantabria. Sobre si ese tipo de decisiones pueden espantar a una parte adulta de su público, Ward explica que no hay secreto aparte de crear buenas historias: «Si añadimos un elemento para satisfacer a un grupo pero no aporta nada a la historia, no estamos haciendo bien nuestro trabajo. Queremos representar el mundo como es, de forma honesta y auténtica, y que la gente se sienta identificada en la película». Dicho así, no parece gran cosa, pero el propio creativo admite que «no siempre es fácil el equilibrio entre la representación y contar bien la historia». En cualquier caso, un capítulo más en la rentabilización del éxito incombustible de la firma, al más puro estilo Disney.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación