Un arqueólogo sostiene que el Hospital de Oropesa se asienta sobre una sinagoga

El arqueólogo Ramón Villa, natural de Quintanar de la Orden, sostiene que el Hospital San Juan de Oropesa está construido sobre los restos de una sinagoga, aunque le falta «la prueba documental».

«Sabemos que en Oropesa hay una sinagoga, que el conde de Oropesa se la queda y que la condesa manda construir un hospital», explica el arqueólogo, que ha dictado una ponencia en la XXI edición del curso «Cultura hispanojudía y sefardí» que se ha impartido en Toledo este mes.

El dato documental que falta, señala Villa, «estará, seguramente, en el archivo de los duques de Frías, que son quienes se quedan con la casa de Oropesa». Según Villa, en numerosos documentos históricos hay referencias de alrededor de treinta sinagogas en la provincia de Toledo, en localidades como Talavera de la Reina, Ocaña, Yepes, La Puebla de Montalbán, Casarrubios del Monte y Santa Olalla, entre otros, pero su localización no es segura. No obstante, «podría casi confirmar», continúa Villa, que la de Oropesa se encuentra «subiendo al castillo, a la izquierda, subiendo al Palacio del Parador», y que años después fue convertido en un hospital en torno al año 1540.

Sobre si hay pruebas físicas de esta sinagoga, Villa afirma que el «edificio entero» quedó abandonado tras la expulsión de los judíos a finales del siglo XV, momento en que los judíos empezaron a «malvender» sus bienes antes de marcharse.

Lo que ocurrió, según Villa, es que los concejos y feudos de los nobles, condes, duques y clérigos prohibieron la venta de edificios comunales, como las sinagogas, para que se quedaran abandonadas y, así, tomarlas después para diferentes usos, como hospitales, ermitas, conventos o, incluso, iglesias.

En cuanto a la localización de los templos judíos en otros municipios toledanos, el arqueólogo explica que su estudio se basa en una hipótesis que ha obtenido como resultado de cruzar dos documentos.

Por un lado, las relaciones topográficas los ha comparado con una planimetría de finales del siglo XIX, que realizaron topógrafos por encargo del ejército nacional, con el objetivo de «levantar planos de los edificios importantes de las localidades».

«Si la información cruzada te dice que un determinado hospital se fundó pocos años después de la expulsión judía» y, además, tiene características comunes a todas las sinagogas, como «la orientación oeste-este» hacia Jerusalén, el «hueco» equivalente al altar mayor cristiano para guardar las Tablas de la Tora y el edifico se halla dentro de las murallas, «habrá que sospechar».