El «pacto del retrete» avanza en Segovia

Pese a que según el coordinador provincial de IU en Segovia, José Ángel Frías, la gestión del socialista Pedro Arahuetes al frente del Ayuntamiento es «como un retrete que está lleno de mierda», la escatológica metáfora no parece que sea motivo suficiente para que el pacto de izquierdas peligre en la capital del Acueducto. La reunión para «desatascar» las diferencias existentes entre ambas formaciones fue por el pasado lunes menos «indigesta» de lo previsto. «Hubo tensión, sobre todo al principio, porque se habían dicho muchas cosas, pero decidimos hacer una “limpia” y olvidar los reproches de unos de otros», explicaba ayer a ABC el edil de la coalición, Luis Peñalosa, cuyo voto dará con toda probabilidad cuatro años más de poder a Arahuetes. Precisamente, la presencia del regidor en funciones fue uno de los «logros» de IU, que se negaba a sentarse en la misma mesa de los socialistas sin la presencia del hombre que va a regir los destinos de los segovianos. Una vez superado este «marrón», el «pacto del retrete» está mucho más cerca de ser una realidad. Desde Izquierda Unida confiaban ayer en que el PSOE aceptaría las cuatro «prioridades» para que «se pueda seguir negociando y se pueda designar alcalde». Entre ellas, dos con cierto «tufillo», pero que parece que no «huelen» mal a los socialistas con tal de que se les garantice el puesto. Serían el compromiso de Arahuetes de que «se retiren los nombres franquistas» de las calles, plazas y estatuas que hay en la ciudad «para cumplir así la Constitución», según mantiene Peñalosa; y el más sorprendente de «respetar la aconfesionalidad» del Ayuntamiento hasta el punto de que Consistorio «no organice ningún acto religioso», según defiende Izquierda Unida.

El resto de las «propuestas irrenunciables» son ya «viejas reivindicaciones» del partido coordinado a nivel regional por José María González. Por un lado, que «abandonen» la construcción del aparcamiento de Tilos y que se cree «una figura de protección a ese paseo para evitar posteriores conflictos». Por otro, la elaboración de un plan especial de áreas históricas.

Si se aceptan en la reunión de esta tarde las exigencias de IU «hablaríamos de otras medidas de organización del ayuntamiento», ya con el voto de IU a Arahuetes garantizado. En este sentido, Peñalosa dijo sentirse «optimista». La reunión del lunes llegó después de que se suspendiera una primera cita prevista para el pasado viernes y a la que Izquierda Unida declinó acudir porque no estaba prevista la presencia del aún alcalde en funciones. Aquel día, además de cubrirse de gloria con la referencia al «retrete», el coordinador provincial de IU criticaba a los dirigentes del PSOE «por no respetas ni tomar en serio a la coalición y dar ya por hecho» que Peñalosa apoyaría la investidura del socialista Pedro Arahuetes como el próximo alcalde de Segovia. al día siguiente era José María González el que enfriaba los ánimos y pedía «disculpas en nombre de IU Castilla y León» por las «expresiones escatológicas» realizadas por Frías «que nunca tuvieron en su ánimo ofender a los votantes del PSOE, ni ofender a la izquierda de Segovia, ni a los ciudadanos de Segovia».